LA HABANA, 19 jun (Xinhua) -- El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, fustigó hoy desde Austria, donde realiza una visita de trabajo, la política anunciada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hacia la isla, y reiteró la soberanía de ésta.
En conferencia de prensa transmitida en vivo por la radio y televisión cubanas y por Internet, el canciller aseguró que en Cuba "nadie estaba en vilo esperando el anuncio imperial", y que de hecho, en ese momento el pueblo estaba debatiendo los lineamientos que regirán el futuro político y económico de la nación.
"Los cambios que sean necesarios en Cuba los decidirá únicamente el pueblo cubano; no pediremos opinión ni permiso", puntualizó el titular del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex).
Rodríguez afirmó que la ínsula no aceptará condicionamientos ni negociará (con Washington) bajo presión o amenaza, y que rechaza la intervención o injerencia extranjera en sus asuntos.
Sobre la disposición de la mayor de las Antillas a la paz, Rodríguez señaló que su gobierno seguirá actuando conforme a la proclama de América Latina y el Caribe como zona de paz firmada en La Habana durante la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
El canciller fustigó la "doble política" de Trump sobre derechos humanos, y aseguró que Cuba tiene mucho que mostrar al respecto.
La presentación de Trump en el teatro "Manuel Artime", de Miami el pasado viernes fue, en opinión de Rodríguez "un grotesco espectáculo salido de la guerra fría".
Aseguró que la derogación de la directiva del presidente Barack Obama de octubre de 2016 por Trump es un retroceso en las negociaciones, que afectará las relaciones, no solo con Cuba, sino con toda Latinoamérica, y dañará a las organizaciones civiles de Estados Unidos, al comercio y su empresariado frente a la competencia.
Calificó de "infantil" la prohibición de Trump de que firmas norteñas comercien con compañías cubanas vinculadas a las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y al Ministerio del Interior de la isla. "Eso logra un efecto contrario: une en mayor patriotismo".
El canciller criticó la interdicción a los viajes de estadounidenses a la ínsula, y dijo que, según encuestas, el 73 por ciento de los norteamericanos apoya el fin del bloqueo, sobre todo los jóvenes, que el 75 por ciento respalda el restablecimiento de relaciones entre las dos naciones, y que la mayoría no aprueba las medidas del nuevo mandatario.
Se ha demostrado en los últimos años que las dos naciones pueden convivir pacíficamente, dijo el titular del Minrex, quien reiteró la voluntad de La Habana de continuar el diálogo sobre la base de la igualdad y el respeto a la independencia y soberanía.
Cuba y Estados Unidos pueden cooperar y convivir civilizadamente, respetando cada uno las diferencias, puntualizó Rodríguez.
