BAGDAD, 5 jun (Xinhua) -- La vida de hasta 100.000 niños iraquíes está en grave peligro debido a los combates que se intensifican entre las fuerzas de seguridad iraquíes y milicianos extremistas del Estado Islámico (EI) en Mosul.
"Alrededor de 100.000 niñas y niños permanecen en condiciones de extremo peligro en la antigua ciudad y otras áreas del oeste de Mosul. Muchos están atrapados por el fuego cruzado, mientras que hospitales y otras instalaciones médicas también han sido atacados", indicó el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Irak a través de un comunicado.
"La vida de los niños está en la línea. Los niños están siendo asesinados, lesionados y utilizados como escudos humanos. Los niños experimentan y sufren una terrible violencia que ningún humano debiera padecer. En algunos casos, han sido forzados a participar en combates y actos de violencia", advierte el comunicado.
Unicef hizo la advertencia cuando las fuerzas de seguridad iraquíes apoyadas por la coalición internacional contra el Estado Islámico lleva a cabo una importante ofensiva para sacar a los milicianos del EI de sus principales bastiones en el oeste de Mosul. Sin embargo, algunos vecindarios, incluyendo el centro de la vieja ciudad densamente poblado, aún siguen bajo el control de milicianos extremistas.
Hasta ahora, las tropas recapturaron grandes extensiones de al-Zanjili y al-Shifaa, pero las batallas en las calles continúan por doquier debido a que los milicianos extremistas del EI muestran una fuerte resistencia, mientras los intensos enfrentamientos y bombardeos ocurren en las orillas del centro de la ciudad.
Debido a la escalada del conflicto, Unicef pide a todas las partes en el oeste de Mosul que protejan a los niños y los mantengan a salvo en todo momento, de acuerdo con sus obligaciones del derecho humanitario, dice el comunicado de Unicef.
"Los ataques contra civiles e infraestructura civil, incluyendo hospitales, clínicas, escuelas, casas y sistemas hidráulicos, deben detenerse de inmediato", añadió.
Previamente, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) señaló que no se puede determinar con exactitud el número de civiles que permanecen en la antigua ciudad y en los vecindarios de los alrededores. No obstante, la oficina calcula que 200.000 personas podrían dejar sus casas en los próximos días de combates.
"No sabemos con seguridad cuántos civiles quedan en los distritos en poder del EI, pero unas 200.000 personas adicionales podrían tratar de irse en los próximos días", dice un informe de OCHA publicado el 18 de mayo.
El ejército iraquí indicó que más de 90 por ciento de la ciudad ha sido arrebatada al EI en la actual gran ofensiva iniciada en octubre del año pasado.
Mosul, a 400 kilómetros al norte de la capital iraquí Bagdad, ha estado bajo control del EI desde junio de 2014, cuando las fuerzas del gobierno abandonaron sus armas y huyeron, lo que permitió a los milicianos del EI tomar el control de partes de las regiones norte y oeste de Irak.
