CARACAS, 18 may (Xinhua) -- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, invitó este jueves a los oponentes de su convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente, a emprender un "debate jurídico" respecto a la legitimidad de esta iniciativa.
El jefe de Estado aseguró hoy en medio de un encuentro con estudiantes, que existe la posibilidad de introducir recursos ante el Poder Judicial para "aclarar dudas" sobre el instrumento con el cual se prevé modificar la Carta Magna, y que ha generado desacuerdos en el seno de constitucionalistas.
Maduro dijo que "quien no esté de acuerdo con la Constituyente" puede solicitar ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) un recurso de interpretación y sentencia.
Esto en referencia a la aseveración del Ejecutivo de que para llevar a cabo la Constituyente no hace falta realizar una consulta popular previa, como se hizo en el año 1999, sino que el presidente puede activar directamente la convocatoria.
"Me ha informado el Procurador General de la República que ya cursan en el Tribunal Supremo unos diez recursos de interpretación sobre la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente, bienvenido sea el debate jurídico, constitucional, bienvenida la democracia", expresó.
El dignatario hizo mención del artículo 347 de la Constitución vigente que establece que el presidente de la república puede "tomar la iniciativa" para este proceso.
Aunque aseveró que el TSJ tiene la obligación de recibir los recursos de interpretación y sentencia, dijo que el máximo tribunal se limitará a "despejar cualquier duda" concerniente a la convocatoria.
Maduro saludó la aceptación de la Conferencia Episcopal Venezolana para reunirse con la Comisión Presidencial para la Constituyente, liderada por el ministro de Educación, Elías Jaua.
"Ojalá la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) se saliera de la violencia y viniera al diálogo", comparó.
Auguró que el Gobierno logrará en lo pronto sentarse en una nueva mesa de diálogo con la alianza opositora a fin de concretar la estabilidad del país suramericano.
"Más temprano que tarde voy a sentar a la MUD en la mesa de diálogo por la paz", acotó.
En tanto, el principal bloque adverso a Maduro insiste en su negativa a un encuentro con el Gobierno, y aboga por reforzar las acciones de calle que desde hace unas seis semanas presionan a la administración Maduro.
