WASHINGTON, 4 may (Xinhua) -- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, restó el jueves importancia a la reciente tirantez de sus lazos con el primer ministro australiano, Malcom Turnbull, y ensalzó la "enorme amistad" que existe entre los dos países.
En enero pasado, ambos mantuvieron una conversación telefónica que se torció cuando Turnbull le dijo a Trump que confiaba en que respetase el acuerdo de la Administración Obama con Australia para reubicar a 1.200 refugiados de Africa, Oriente Medio y Asia acogidos en asentamientos en las naciones insulares de Nauru y Papúa Nueva Guinea, en el océano Pacífico.
"Fue una buena conversación telefónica", dijo, sin embargo, Trump el jueves después de su primera reunión con Turnbull, transcurrida a bordo del portaaviones fuera de servicio USS Intrepid con motivo de la celebración del 75º aniversario del mar del Coral, acontecida en la Segunda Guerra Mundial y en la que ambos países lucharon contra Japón.
Posteriormente, en la cena de gala, subrayó: "Dijeron que fue una conversación áspera, pero realmente no lo fue". Reconoció, no obstante, que sí fue "un poco tensa".
La llamada, que debía durar una hora, terminó tras 25 minutos y Trump le dijo a Turnbull que había sido, de lejos, la peor de sus conversaciones telefónicas, informaron los medios de comunicación. Posteriormente, tuiteó que el acuerdo sobre los refugiados era "estúpido".
Sin embargo, durante su viaje a Australia en abril, el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, aseguró que Estados Unidos respetaría el pacto.
