Añadió que quedó muy impresionado por el navío chino: "Es impresionante. Está todo alfombrado. Es realmente hermoso. El interior es como un hotel de lujo (...) ¡Y está limpio!"
Según el presidente, la visita al buque de guerra chino se enmarca dentro de la cimentación de la confianza y la buena voluntad entre Manila y Beijing.