Por Elena Chuquimarca
QUITO, 12 abr (Xinhua) -- "Volví a la vida, para mí todo fue un milagro", dijo Pablo Córdova, un ecuatoriano que fue rescatado tras pasar 46 horas bajo los escombros de un hotel que se desplomó por el terremoto de 7,8 grados Richter que azotó la costa norte de Ecuador el 16 de abril de 2016.
Persignándose en todo momento y bebiendo su orina en un intento por sobrevivir, pudo ser rescatado, gracias a una llamada que hizo desde su celular al Servicio Integrado de Emergencias ECU 911, diseñado y construido por la empresa China National Electronics Import and Export Corp (CEIEC).
Este servicio integra las agencias de seguridad y socorro de Ecuador en una sola plataforma marcando un solo número telefónico: 911.
"Hola, soy Pablo Córdoba, estoy en emergencia, estoy atrapado y quiero que me saquen", dijo el hombre desesperado a la operadora.
Córdoba quedó atrapado en el segundo de cinco pisos del hotel "El Gato", en Portoviejo, capital de la provincia occidental de Manabí, epicentro del terremoto, donde trabajaba como recepcionista.
La operadora del ECU 911 le contactó de inmediato con José Puente, socorrista del Cuerpo de Bomberos de Bogotá, Colombia, a quien dio detalles de su ubicación.
Una hora después, máquinas de perforación removieron los escombros y lograron sacarlo con vida.
"Siento una alegría infinita porque volví a la vida, volví a nacer de entre los escombros. Escuchaba cómo removían los escombros, llegaron los rescatistas de Bogotá, me llamaron y yo decía ¡aquí estoy! con voz fuerte", relató Córdoba emocionado.
Su celular, apenas uno básico, fue clave para su rescate, agregó el hombre, quien apagaba el aparato cuando no tenía señal para ahorrar batería.
Una llamada al 911 también ayudó a asistir a una mujer de la tercera edad víctima de cáncer de colon, según contó a Xinhua su nuera, Magdalena Chiriboga.
"Mi suegra estaba en cuidados paliativos en una casa de salud por su avanzado cáncer, y como ya no pudieron tenerla, la mandaron a casa. Una madrugada se puso mal, yo estaba sola con ella, no sabía qué hacer, en la desesperación llamé al 911", recordó la mujer.
"La operadora me pedía información para poder enviar una ambulancia a la casa. En media hora llegó la ayuda y un paramédico atendió a mi suegra, eso me dio tranquilidad, es un servicio efectivo", contó.
El número 911, gratuito y activo las 24 horas del día los 365 días del año, fue un canal efectivo de comunicación para rescatar con vida a 78 excursionistas, 70 de ellos niños, que se habían extraviado en una zona montañosa y selvática de Valle Hermoso, en la provincia tropical de Santo Domingo de los Tsáchilas, en agosto de 2016.
Una llamada dio la alerta, y gracias a dispositivos tecnológicos que dispone el Servicio se logró geolocalizar un teléfono celular de uno de los extraviados, lo que permitió obtener su ubicación.
Las experiencias de ayuda son múltiples y los ciudadanos consideran como un avance el contar con un Servicio Integrado de Seguridad.
"El sistema ECU 911 genera una sensación de seguridad; en las calles hay muchas cámaras vigilando en tiempo real el tráfico, protestas o cualquier suceso como robo o asalto, en el que puede actuar la Policía, por ejemplo", explicó a Xinhua Edison Chicaiza, un empleado privado de 49 años.
Por su parte, Dayana Jiménez, estudiante universitaria, opinó que "es bueno que el país cuente con tecnología de China para este proyecto de seguridad".
"China se ha destacado por su capacidad innovadora de crear tecnologías, y qué bueno que nuestro país reciba eso para el ECU 911; creo que es un aporte para la seguridad de todos los ciudadanos", dijo.
El ECU 911 es un servicio de respuesta inmediata e integral a una determinada emergencia, que inició el gobierno desde 2011 como un proyecto emblemático para mejorar el sistema de seguridad.
Están articuladas al ECU 911 la Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Cuerpo de Bomberos, Comisión Nacional de Tránsito, Ministerio de Salud Pública, Secretaría de Gestión de Riesgos y Cruz Roja.
Cuenta con una moderna plataforma tecnológica que incluye sistemas de videovigilancia, con miles de cámaras, de posicionamiento GPS, de respuesta de alarma y botones de auxilio, entre otros.
La empresa china CEIEC proporcionó el software y hardware, y ha construido 16 centros de mando y control, entre ellos, dos centros nacionales en Quito y Guayaquil, las principales ciudades de Ecuador, además de ocho centros provinciales y cinco centros regionales, así como una Sala de Comando de Emergencia en las Islas Galápagos.
El director nacional del ECU 911, Andrés Sandoval, dijo a Xinhua que Ecuador ha experimentado en los últimos seis años un "cambio integral en seguridad" con el aporte de tecnología china que ha sido de gran beneficio para la ciudadanía.
"Desde que empezó este proyecto, ha sido importante el aporte de las empresas chinas, en este caso de CEIEC. Contamos con tecnología muy robusta, gran capacidad de nuestros servidores, soporte y contingencia a nivel eléctrico y de telecomunicaciones", expuso.
Sólo en el centro de mando de la capital Quito, el Servicio recibe un promedio de 3.000 llamadas de emergencia al día, según el director de Operaciones del ECU 911, Diego Ripalda, quien valoró la cooperación china en este proyecto.
"Este proyecto es sin duda emblemático, porque antes de que existiera el Servicio Integrado de Seguridad teníamos varios números de emergencia, no teníamos la integración, la tecnología que este proyecto pudo brindar al país", señaló a Xinhua.
"Esto ha sido fundamental para una atención de emergencia eficiente. El software que estamos manejando es integral, desde que ingresa la llamada se puede saber quién es el usuario, donde está ubicado y podemos hacer la gestión para enviar el recurso más cercano donde se está originando la emergencia", explicó.
Ripalda añadió que "sin esta cooperación china no podríamos contar con toda la infraestructura y tecnología de punta; sin esto no podríamos contar con los grandes avances que hemos dado en el tema de seguridad ciudadana".
El Servicio permite incluso hacer llamadas tripartitas para resolver emergencias reportadas por extranjeros que no hablan español.
El evaluador de llamadas del ECU 911 de Quito, Iván Gallardo, indicó a Xinhua que el sistema permite coordinar con personal de la entidad o con embajadas para contar con un traductor.
"Es un trabajo que te recompensa bastante bien por el hecho de que se está haciendo algo por la comunidad, una llamada puede salvar una vida, se salvan vidas, eso es lo que se hace aquí", expresó.
Desde su implementación, el ECU 911 se convirtió en un referente en la región por la "tecnología de última generación" utilizada, agregó Sandoval.
La alta calidad y el estándar chino en la infraestructura tecnológica implementada se pusieron a prueba tras el terremoto del 16 de abril de 2016, donde el ECU 911 tuvo un papel activo para aliviar el sufrimiento causado por el desastre.
La entidad fue justamente evaluada durante esa emergencia por la Asociación Europea de Números de Emergencia, EENA (por sus siglas en inglés).
Tras evaluar la tecnología, capacitación y atención, el EENA entregó al ECU 911 el certificado internacional de calidad, con lo que Ecuador se convirtió en el primer país de América Latina y el quinto a nivel mundial en recibir dicha acreditación.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, ha señalado que Ecuador es un país que cada vez está más seguro, por la reducción de delitos a raíz de la vigencia del ECU 911.
Ecuador cerró 2016 con una tasa de homicidios de 5,6 casos por cada 100.000 habitantes, la más baja de las últimas tres décadas, según datos del Ministerio del Interior.
