LONDRES, 10 abr (Xinhua) -- Miles de oficiales de policía de todo Reino Unido se alinearon hoy a lo largo de las calles del centro de Londres con motivo del funeral del policía asesinado Keith Palmer.
El policía de 48 años de edad, perteneciente a la Policía Metropolitana de Londres, fue una de las cinco personas muertas en el ataque del 22 de marzo de Khalid Masood contra el Parlamento.
La reina Isabel II dio permiso para un servicio de cuerpo presente de Palmer en una capilla del Parlamento antes del funeral del policía en la Catedral de Southwark en Londres.
Palmer era casado, tenía una hija de cinco años y fue miembro de la Policía Metropolitana durante 15 años. Al frente de la carroza se colocó una corona floral con la leyenda "El papá número uno".
La familia de Palmer asistió a un breve servicio privado en la Capilla de St Mary Undercroft el domingo y la policía del Parlamento y el grupo de protección diplomática realizaron una guardia de honor del ataúd durante toda la noche.
Al servicio de hoy asistieron 50 miembros de la familia de Palmer, incluyendo a la esposa, la hija, la madre, el padre, el hermano y las hermanas.
Más de 20.000 elementos de la Policía Metropolitana estuvieron de guardia con motivo del funeral.
Todos los policías alineados a lo largo de la ruta del funeral inclinaron la cabeza al paso de la procesión y muchos lloraron en silencio.
Palmer, quien estaba desarmado, fue apuñalado de muerte cuando protegía la entrada al Parlamento. El asesino fue abatido por oficiales armados que se apresuraron a asistir a Palmer.
Miles de personas también se ubicaron a lo largo de la ruta del funeral que comenzó en el Palacio de Westminster y pasó por el sitio en el que el policía fue asesinado.
En cada una de las estaciones de policía del país se guardaron dos minutos de silencio y en la Nueva Scotland Yard y en todos los cuarteles de policía del país las banderas se izaron a media asta.
Sara Thornton, del Consejo Nacional de Jefes de Policía, dijo que Reino Unido nunca había presenciado un funeral de esta magnitud para un oficial de policía caído.
"Keith no dudó en actuar al ser enfrentado por un terrorista. Su valentía y su coraje es algo de lo que todos los oficiales están muy orgullosos, aunque también hay en enorme sentido de tristeza y de pérdida". Fin
