QUITO, 31 mar (Xinhua) -- Un "gobierno para todos y no para unos pocos", es lo que promete Lenín Moreno, candidato del oficialista movimiento Alianza PAIS, de ganar la presidencia de Ecuador en la segunda vuelta electoral que disputará el próximo domingo ante el ex banquero opositor Guillermo Lasso.
"Tendrán a su lado un presidente que les impulse y que trabaje por ustedes ¡Seremos un gobierno de estabilidad, de unión y de paz!", dijo Moreno durante la campaña electoral, que terminó la víspera, luego de 20 días de proselitismo político.
Moreno, un administrador público de 64 años y quien sufre de paraplejia, aspira tomar la posta al presidente Rafael Correa, de quien fue su vicepresidente entre 2007 y 2013.
El aspirante presidencial ganó la primera vuelta electoral con más de 39 por ciento de los votos válidos en los comicios del 19 de febrero pasado.
Llega a la segunda ronda al frente de la intención del voto, según han coincidido encuestas previas a la contienda electoral, que disputará contra el candidato opositor, Guillermo Lasso.
A la luz de estos sondeos, Moreno se ha declarado optimista de una victoria.
"Hoy estamos frente a nuevas decisiones, el futuro de nuestra patria otra vez está en nuestras manos y es momento de reflexionar sobre el país que queremos: una patria de ciudadanos con derechos o un país donde solo seamos mirados como clientes", ha señalado Moreno.
Moreno busca la continuidad de la llamada Revolución Ciudadana, el proyecto político implementado por Correa en los diez años de su gobierno, orientado en políticas en favor de los sectores más pobres y marginados.
El proyecto político está fundamentado en los principios del socialismo del siglo XXI, un concepto ideológico que promueve la supremacía del trabajo humano sobre el capital.
"Queremos una sociedad humana y solidaria o un país gobernado por una élite económica que solo ve privatización de la salud y la seguridad social disfrazada de zonas francas", planteó Moreno.
La presidencia de Correa es la que más ha durado en el último siglo en Ecuador, país que llegó a tener siete presidentes entre 1997 y 2007, en medio de una grave inestabilidad política.
Con la Revolución Ciudadana, el oficialismo persigue "un cambio radical, profundo y rápido de las estructuras políticas, sociales y económicas (de Ecuador)", ha dicho Correa.
El analista político, Fernando Casado, dijo a Xinhua que el 2 de abril próximo "está en juego la continuidad del modelo de Correa, que ha sacado a unos 2 millones de personas de la pobreza, y el regreso al poder de la derecha con una agenda liberal".
Casado apuntó que también está en juego un eventual giro hacia la derecha como ha ocurrido en Argentina y Brasil, tras varios años de liderazgo de gobiernos de izquierda.
Moreno ha prometido la generación de 250.000 empleos cada año, crear 40 nuevas universidades técnicas, erradicar la desnutrición infantil y la pobreza extrema, acabar con la violencia de género, desterrar las drogas y un agresivo plan de vivienda popular.
Nacido en Nuevo Rocafuerte, en la provincia amazónica de Orellana, Moreno se crió en el seno de una familia de clase media, y a los tres años se trasladó a Quito (capital), donde cursó sus estudios y obtuvo una licenciatura en administración pública.
Con estudios en medicina y psicología, también se dedicó a la docencia y actividades vinculadas al turismo.
En 1998, su vida cambió radicalmente tras quedar postrado a una silla de ruedas a consecuencia de un asalto con un disparo en la espalda.
Desde entonces se convirtió en un motivador profesional a través de conferencias que llevan un mensaje de alegría, solidaridad y amor, además de escribir 10 libros inspirados en el humor y la motivación personal.
De hablar pausado y sonrisa fácil, Moreno tiene una personalidad conciliadora y abierta al diálogo, cualidades que, según analistas, contribuyen a un mejor relacionamiento político y social.
De llegar a la presidencia, gobernaría con una cómoda estabilidad política, ya que el oficialismo contará con una mayoría absoluta de 74 miembros en la próxima Asamblea Nacional (poder legislativo) que se instalará en mayo.
La ex canciller y asesora de Moreno, María Fernanda Espinosa, dijo a la prensa local que el candidato ha tendido su mano a todos los sectores que coincidan con sus propuestas para sumar apoyos.
"Ha dicho que va a ser un gobierno de unidad. La política es el arte de las alianzas y son necesarias, pero no solamente en el escenario de una segunda vuelta. Para gobernar son necesarios acuerdos mínimos, para hacer una lista de las prioridades nacionales", indicó Espinoza.
Para la segunda vuelta electoral, Moreno ha sumado el apoyo de varios movimientos y organizaciones, tanto políticas como sociales.
Casado y padre de tres hijas, Moreno asegura que su carta de presentación es su gestión en favor de los discapacitados, la cual llevó a cabo cuando ejerció como vicepresidente.
Implementó entonces programas de ayuda social y económica para este sector vulnerable, gestión que fue reconocida a nivel internacional y le llevó a ser nominado al Premio Nobel de la Paz en 2012, galardón que finalmente obtuvo ese año la Unión Europea (UE).
En 2013, dejó su cargo como vicepresidente al ser designado como enviado especial de Naciones Unidas (ONU) sobre Discapacidad y Accesibilidad en Ginebra, Suiza.
