MADRID, 30 mar (Xinhua) -- La Policía Nacional de España ha desarticulado una banda de rumanos que se dedicaba a comprar droga en varias provincias, especialmente en las ciudades de Tarragona y Bilbao, norte del país, para venderla luego en otros países europeos, informaron hoy fuentes policiales.
En la operación se ha detenido a 15 personas y la policía se ha incautado de 180 kilos de hachís, 20 kilos de marihuana, 5,6 kilos de speed (derivado de la anfetamina) y armas de fuego, entre otras cosas.
La Policía indicó que parte del hachís, en concreto 40 kilos, fueron confiscados en el interior de un vehículo interceptado en el puesto fronterizo de la ciudad española de La Junquera (Gerona, Cataluña) con Francia, ocultos entre un cargamento de pimientos con destino a Suecia.
Asimismo, las pesquisas comenzaron a mediados del pasado año, cuando la policía recibió una información por parte de la Agregaduría de Interior de España en Rumanía, que indicaba que una persona de este país de Europa del Este se había desplazado a territorio español para realizar contactos con el objetivo de adquirir cannabis y para comercializar drogas sintéticas.
La propia investigación policial condujo a que los agentes localizarán a varios ciudadanos, también de origen rumano, establecidos en diferentes provincias, entre las que destacaban las citadas ciudades de Tarragona y Bilbao.
Posteriormente, según la nota policial, tras las investigaciones desarrolladas, los agentes lograron frustrar el envío de 20 kilos de marihuana con destino a Italia en un control policial rutinario, que originó la detención de dos miembros de la red.
Las fuentes policiales informaron de que dos meses después, los investigados trataron de enviar otros 20 kilos de hachís desde Bilbao a Tarragona en una furgoneta, que también fue interceptada, junto con el estupefaciente, y que llevó a la detención de los dos ocupantes del vehículo.
Por último, las investigaciones permitieron localizar una finca ubicada en Hostalric, Barcelona, donde los rumanos ocultaban la droga y fue en ese lugar, detalla la policía, donde se practicó un registro en el que los investigadores confiscaron 120 kilos de hachís y detuvieron a tres personas más, para posteriormente realizar registros en los domicilios de los detenidos.