Los heridos fueron trasladados al hospital de Sehwan, desde donde las víctimas con lesiones de gravedad fueron trasladadas en avión y helicóptero a hospitales de Karachi y del vecino distrito de Nawabshah.
En una publicación de Twitter, el general de división Asif Ghafoor, director general de los Inter-Servicios de Relaciones Públicas, el servicio de prensa del ejército, indicó que el general Qamar Javed Bajwa ordenó a tropas militares y paramilitares brindar ayuda a las víctimas del atentado.
Ghafoor añadió que helicópteros de visión nocturna de la armada pakistaní y un avión C-130 de la fuerza aérea pakistaní fueron prestados para trasladar los heridos a hospitales de Karachi.
Un numeroso contingente de la policía llegó al lugar de los hechos y lo acordonó para investigar el incidente.
El grupo terrorista mundial Estado Islámico (EI) reivindicó el ataque. En su sitio web árabe AMAQ, el EI indicó que un atacante suicida "hizo detonar su chaleco en el templo chiita de Lal Shahbaz Qalandar, en la provincia de Sindh, sur de Pakistán".
Esta es la segunda vez en los últimos tres meses que el EI se adjudica un ataque contra un templo pakistaní.
El 12 de noviembre de 2016, al menos 52 personas murieron y más de 100 resultaron heridos cuando un atacante del EI se hizo detonar un templo de la provincia de Baluchistán, suroeste de Pakistán.
El primer ministro de Pakistán, Nawaz Sharif, condenó el ataque y ordenó a los departamentos involucrados brindar el mejor tratamiento médico posible para los heridos.
El general Bajwa hizo un llamado al país a mantener la calma.