BEIJING, 16 feb (Xinhua) -- Las compañías chinas de teléfonos móviles están en una ofensiva para conquistar nuevos mercados internacionales, si bien no descuidarán sus negocios en los mercados emergentes, los cuales les han representado jugosas ganancias, informa hoy jueves la prensa de Beijing.
India, Rusia, Brasil, el sureste de Asia y varios países africanos seguirán siendo la punta de lanza de esas empresas durante los próximos dos años, pero al mismo tiempo redoblarán sus esfuerzos para entrar en otros mercados, según el periódico Securities Daily.
De acuerdo con el informe, en este año las compañías chinas más importantes del sector no registrarán grandes cambios en el mercado nacional, en tanto que India será el escenario más importante para la ampliación de sus negocios en el exterior.
Cifras de la consultora china Sino-MR muestran que en el año pasado el mercado nacional registró un incremento interanual del 17 por ciento. La firma prevé que el crecimiento en 2017 será del 1 por ciento, y que la tasa oscilará entre 1 y 2 por ciento durante los próximos tres años.
En el caso de Huawei, una de las principales compañías de celulares del país, la cuota de ventas, tanto a nivel doméstico como internacional, es de 50 por ciento. Sin embargo, otras empresas nacionales tienen una cuota relativamente pequeña en el mercado internacional, por lo que tienen más espacio para crecer, según fuentes de IHS Technology, otra consultora, citadas por el rotativo.
Actualmente Huawei es ampliamente exitosa en Europa y América Latina, al tiempo que a ZTE le ha ido muy bien en Rusia. Otras marcas chinas, como OPPO y Vivo, son cada vez más populares en el sureste de Asia.
El artículo señala que mercados emergentes como India, Rusia y Brasil son el principal motor para la ampliación de los negocios de las compañías chinas, y define los mercados de Europa y América del Norte como "claves" para el fortalecimiento de las marcas nacionales y la multiplicación de sus beneficios.
Debido a la saturación del mercado interno y la feroz competencia derivada del mismo, en 2014 las empresas chinas empezaron a mirar más allá de las fronteras. Aprovechando su experiencia en el manejo de los negocios internacionales, así como su madurez en el tema de los derechos de propiedad intelectual, Huawei y ZTE han logrado hacerse a sendos lugares en los mercados de Europa y Norteamérica.
Expertos consultados por el periódico señalaron que los mercados de europeo y norteamericano constituyen las zonas más difíciles para el proceso de la internacionalización de las firmas chinas, y que en la actualidad el más importante es el de India, el cual está "en una fase clave" para la popularización de los télefonos móviles.
Por supuesto, no sólo los fabricantes chinos han puesto sus ojos en India. En mayo de 2016, el jefe ejecutivo del gigante estadounidense Apple, Tim Cook, visitó ese país con la intención de negociar la aprobación por parte de las autoridades locales para abrir una de sus emblemáticas tiendas oficiales. Sin embargo, no lo logró.
A diferencia de su competidor estadounidense, las empresas chinas han sido muy activas en India. Por ejemplo, Xiaomi ya ocupa el tercer lugar en ese mercado, y trabaja con la meta de ubicarse en el primero en los próximos tres a cinco años. Huawei, a su vez, planea seducir al 10 por ciento de los compradors del vecino país en este año. Entre tanto, OPPO y Vivo quieren establecer fábricas en territorio indio.
De acuerdo con datos de la firma de consultoría Counterpoint, en 2016 las marcas chinas ya poseían el 46 por ciento del mercado de India, cuando dos años atrás era de apenas 14 por ciento.
El reportaje precisa que los indios prefieren los celulares de bajo costo, como lo demuestra el hecho de que los más vendidos son aquellos con precios inferiores a los 100 dólares. En comparación con Apple y Sumsung, las compañías chinas son capaces de producir teléfonos inteligentes de buena calidad con costos relativamente más baratos, señala el diario.
En cuanto al mercado africano, la compañía china Transsion representa el 40 por ciento de la cuota del mercado, si bien sus marcas, entre las que se cuentan TECNO, Itel e Infinix, aún no encuentran su espacio entre los consumidores chinos. Su volumen de envíos ocupa el séptimo lugar a nivel mundial, y su volumen de ventas en el extranjero es el segundo frente a otras compañías chinas, sólo por detrás de Huawei.
Hasta el momento, Transsion ha establecido cinco fábricas en diferentes países, cuya producción diaria de móviles alcanza las 300.000 unidades. Su producto estrella en África son los teléfonos de doble tarjeta.
Las fuentes consultadas por la publicación atribuyeron el éxito logrado por las empresas chinas a la madurez y eficiencia de su cadena de suministro.
El informe añade que las compañías nacionales todavía tienen que esforzarse por aprender a solucionar los problemas a largo plazo, mejorando en aspectos como tecnología, calidad y derechos de propiedad intelectual, a fin de ponerse en condiciones de competir con las marcas líderes a nivel mundial.