Por Omar Mendoza
SANTIAGO, 9 feb (Xinhua) -- "El rol de China puede ser fundamental no sólo para que las 21 economías del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) avancen en el libre comercio, sino también para renovar la propia Organización Mundial de Comercio (OMC)".
Así lo sostuvo este jueves, en entrevista con Xinhua, Osvaldo Rosales, consultor y exdirector de Comercio Internacional e Integración de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
"Es posible pensar que China sea parte de un nuevo TPP (Acuerdo Transpacífico de Asociación), el cual ha sido rechazado por el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump", comentó.
Explicó que "un TPP con China incluida, implicaría que estaría aceptando normativas de bienes, servicios e inversiones, y reforzando la cooperación con los países en desarrollo y eso estimularía no sólo a ese nuevo acuerdo, sino que favorecería al APEC y se podría multilaterizar la OMC".
Comentó que, tras la salida de EEUU del TPP, los países del Asia-Pacífico "dirigen su mirada hacia la Asociación Económica Regional Integral (RECEP) que impulsa China", la cual está integrada por 16 naciones de esa región.
Opinó que "un acuerdo de este tipo con el apoyo de China y del resto de los países integrantes del Foro de APEC, así como de las naciones que formaron el TPP, con la excepción de EEUU, facilitaría su promoción en la OMC, actualizando el marco multilateral del comercio con un modo más amigable para los países en desarrollo".
Rosales subrayó que "por lo tanto, ahí hay un rol fundamental que China puede jugar en esta reactualización del marco multilateral del comercio internacional".
Añadió además que "en el marco de esta integración regional, la Alianza del Pacífico y el Mercosur son clave y deberían concordar en un par de iniciativas estratégicas de América Latina con China".
Para Rosales, "el abandono de EEUU del TPP es parte de un proceso más amplio, al incluir la construcción de un muro en la frontera con México, la crítica a las políticas económicas de Europa y Alemania, así como también el Brexit (salida del Reino Unido de la Unión Europea) y otras posturas ultranacionalistas y también populismos de derecha".
Aseguró que "en el fondo, es la expresión del reclamo de los sectores medios frente, fundamentalmente, a una modalidad de globalización que ha acentuado la concentración de ingresos".
Explicó que Estados Unidos ya lleva décadas de estancamiento del salario real, mientras las ganancias de las grandes empresas tienen niveles desorbitados y, paralelamente, empeora la salud,la educación pública y no se avanza en la infraestructura.
Además, dijo que "Estados Unidos pierde competitividad industrial y empleos en las manufacturas, debido al cambio tecnológico y también por la presión de las importaciones. Todo eso explica el triunfo electoral del presidente Donald Trump".
"Ahora, tenemos una gran paradoja porque el ciclo neoliberal parte en Estados Unidos y el Reino Unido, y son esas naciones las que dan un paso al costado y tienden a refugiarse en políticas nacionalistas y proteccionistas".
Por lo tanto, dijo, "podemos hablar del fin de un ciclo del capitalismo y no sabemos el signo de lo que viene, pero, claramente, la etapa partió el 2008 con la crisis global, que va a cumplir diez años, y de aquí al 2020, probablemente asistiremos al inicio de la nueva etapa del capitalismo global".
"El abandono de Estados Unidos del TPP, por una parte, y, por otra, el congelamiento del acuerdo entre este país y Europa significa el fin de los grandes acuerdos comerciales promovidos desde occidente, lo cual abre interesantes oportunidades para China, Asia, América Latina y, en general, para los países en desarrollo", precisó.