BEIJING, 27 ene (Xinhua) -- El servicio para inversores de la agencia de calificación Moody's prevé que el mercado inmobiliario de China experimente un menor ritmo de crecimiento de las ventas en 2017 a consecuencia de las medidas tomadas para evitar su explosión.
"Esperamos que las ventas efectuadas en 2017 sean prácticamente las mismas o estén ligeramente por debajo de las de 2016, un ejercicio en que el crecimiento fue boyante", declaró el analista de Moody's Chris Wong en un informe publicado ayer jueves.
Las ventas completadas en 2016 crecieron un 36,2 por ciento interanual para alcanzar un récord de 9,9 billones de yuanes (en torno a 1,4 billones de dólares), impulsadas por alzas tanto del volumen total de ventas como de los precios medios, señala el informe.
El ritmo se redujo en diciembre respecto a los tres primeros trimestres, sin embargo, después de que el gobierno chino implantase unas medidas más estrictas desde finales de septiembre para enfriar el sector, afirmó Wong.
Decenas de ciudades chinas han anunciado medidas a tal fin como los límites a las compras o nuevas restricciones a las hipotecas, para evitar que los precios de las viviendas suban descontroladamente.
Estas medidas han empezado a dar frutos. En diciembre, de las 70 grandes ciudades analizadas por el Buró Nacional de Estadísticas, 46 experimentaron alzas mensuales de los precios, menos que en noviembre, cuando fueron 55, y que las 62 de octubre. Otras 20 ciudades, por su parte, registraron descensos mensuales de los precios, nueve más que en noviembre y 13 más que en octubre.
Moody's también pronostica que el escaso número de viviendas sin vender en las ciudades de primera y segunda clase reducirá el riesgo de que se produzcan correcciones de los precios en los próximos seis meses.