El edificio de 54 años era muy frágil y fue arrasado por las llamas a pesar de los esfuerzos de los bomberos.
Medios locales informaron que al menos 70 personas resultaron heridas.
Edificios cercanos, incluyendo las embajadas de Turquía y Reino Unido, fueron evacuados. Las autoridades de la oficina del gobernador de Teherán descartaron que se trate de un acto terrorista, informó Press TV.