BEIJING, 28 nov (Xinhua) -- El panorama del mercado inmobiliario residencial de China se presenta estable para 2017, aunque subsisten riesgos normativos elevados por el rápido aumento de los precios de las viviendas y el suelo, según un informe de la agencia de calificación Moody's publicado hoy lunes.
"Prevemos un crecimiento plano o ligeramente negativo en las ventas de todo el país, en términos de su valor, respecto de la elevada base de contratos firmados en 2016", indicó el vicepresidente y ejecutivo sénior de crédito de Moody's, Kaven Tsang.
"Estimamos un crecimiento de ventas de alrededor del 25 por ciento interanual para todo el año 2016", añadió Tasang.
Tsang pronosticó que el volumen de ventas se reducirá entre un cinco y un 10 por ciento en 2017 por las medidas más estrictas aplicadas en las grandes ciudades en septiembre y octubre de este año, un declive que será compensado en parte por un modesto aumento de los precios de venta.
Moody's cree improbable que se produzca un drástico descenso de los precios en los próximos seis a 12 meses, dado que el parque de viviendas disponibles en las principales ciudades es relativamente pequeño.
El gobierno tratará de apoyar el equilibrio del sector, dada su importancia para el crecimiento económico.
"Por otra parte, los ingresos marginales medios de los promotores analizados se estabilizarán en 2017 por la reducción de la presión sobre el parque de viviendas y la mejora de los precios, tras las sólidas cifras de ventas de los últimos 12 y 18 meses", opinó la analista de la agencia Cindy Yang.
La liquidez interna en China se mantendrá en unos límites adecuados en 2017 pese a que se prevé un ligero ajuste en la financiación de hipotecas y en el mercado de bonos, lo que a su vez permitirá que los promotores tengan acceso a la financiación y los compradores a las hipotecas, señala el informe.
