Por Esteban Jesen
BUENOS AIRES, 31 oct (Xinhua) -- El piloto argentino Marcos Siebert, de 20 años, conquistó el domingo un título internacional y se dio el gusto de vencer al hijo de una leyenda del automovilismo mundial, el alemán Michael Schumacher.
El joven argentino, oriundo de la ciudad de Mar del Plata, 400 kilómetros al sur de Buenos Aires, se coronó campeón de la Fórmula 4 italiana en el mítico autódromo de Monza.
"Cuanta emoción, cuanto sudor, cuantos días trabajando, cuantas horas lejos de la familia, cuánto esfuerzo, pero todo lo que se desea y se trabaja se obtiene y ese largo camino que empezó hace ya varios años, hoy tuvo el premio más grande de todos y eso fue gritar campeón", sostuvo el piloto.
En un mensaje en su cuenta de Facebook, Siebert le agradeció a "todas esas personas incondicionales" que lo apoyaron en su carrera.
"Hicimos flamear la celeste y blanca en el mítico circuito de Monza, donde alguna vez el gran Juan Manuel Fangio brilló y deslumbró como el lo sabía hacer y para mayor coincidencia también lo hizo con el número 18", escribió en la red social.
Siebert peleó el campeonato con Mick Schumacher, de 17 años, hijo del siete veces campeón alemán de la Fórmula 1, categoría en la que anhela correr algún día.
"Sueño con ser el próximo argentino en la Fórmula 1", declaró Siebert al diario local "Clarín".
En 2012, el joven en ese entonces de 16 años compitió en la categoría "karting" en su ciudad natal, cuando Luciano Crespi, quien se convirtió después en su manager, quedó deslumbrado por su velocidad y lo invitó a probar un auto de fórmula.
Pese a que era la primera vez que experimentaba en el coche, logró el mejor tiempo y allí comenzó una etapa de crecimiento que se cristalizó con el título del domingo.
Siebert, quien comenzó a competir en "karting" a los seis años, admitió que muchas veces se preguntó si valía la pena lo que estaba haciendo.
"Quieras o no, ser el campeón de una categoría tan peleada como la F4 es importantísimo porque es una vitrina mundial", expresó.
La próxima meta para el piloto argentino ahora es correr en GP3, la categoría telonera de la Fórmula 1.
Siebert dijo que Michael Shumaher debe ser tal vez el piloto con más fanáticos de la historia, al tiempo que elogió a su hijo Mick, su rival en la competencia por el título de la Fórmula 4, al referirse a él como un "muy buen piloto", un atributo que "indudablemente lo lleva en la sangre".
