MEXICO, 21 oct (Xinhua) -- Policías federales detuvieron hoy al ex jefe de la Policía del municipio de Iguala, estado de Guerrero (sur), Felipe Flores Velázquez, uno de los principales sospechosos de la desaparición de 43 estudiantes de la escuela normal de Ayotzinapa en 2014, informó el gobierno federal.
En un comunicado, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) dijo que agentes de la División de Investigación de la Policía Federal encabezaron un operativo para capturar a Flores Velázquez en la ciudad de Iguala, a las 7:00 hora local.
Un juez federal concedió a la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) una orden para aprehender al ex director de Seguridad Pública de Iguala, después de que fiscales presentaron cargos en su contra por delincuencia organizada y delitos relacionados con el ataque a los estudiantes magisteriales.
La PGR cuenta con información de que Flores Velázquez ordenó a sus policías privar de la libertad a los estudiantes la noche del 26 de septiembre de 2014, cuando viajaban en autobuses por calles de la ciudad, en aparente colusión con la organización criminal "Guerreros Unidos".
Al ex mando policial también se le adjudica haber ordenado que los estudiantes de la normal rural "Raúl Isidro Burgos" fueran entregados a pistoleros del grupo delictivo, que se habrían encargado después de desaparecerlos.
Flores Velázquez sólo se presentó ante la fiscalía estatal un día después de los hechos para rendir su testimonio y después huyó.
Por la relevancia que implicaba su captura, la fiscalía general ofrecía desde octubre del año pasado una recompensa de 2,5 millones de pesos (134.400 dólares) por información que facilitara su ubicación y detención.
La procuradora general de la República, Arely Gómez, se congratuló a través de su cuenta oficial de Twitter por la aprehensión del ex jefe policial porque, dijo, "permitirá recabar una declaración fundamental para el esclarecimiento de los hechos en Iguala".
La PGR lleva a cabo una nueva búsqueda de los normalistas a través de sofisticados sistemas para localizar fosas clandestinas en varios puntos de Guerrero, principalmente Iguala y el vecino municipio de Cocula.
Una primera hipótesis oficial, a partir de la declaración de integrantes de "Guerreros Unidos" capturados, apuntó a que los pistoleros del grupo criminal mataron y cremaron a los estudiantes en una enorme fogata dentro de un basurero de Cocula.
No obstante, la hipótesis fue rechazada por los padres de familia de las víctimas y desestimada por forenses de dos instancias internacionales que analizaron el caso. Fin
