WASHINGTON, 10 oct (Xinhua) -- Los astronautas que viajen a Marte podrían correr el riesgo de presentar en el largo plazo daño cerebral e incluso demencia por causa de la exposición a los rayos cósmicos, se indicó hoy en un nuevo estudio.
Para explorar el fenómeno llamado "cerebro espacial", investigadores de la Universidad de California, Irvine, (UCI) expusieron a roedores a partículas con elevada carga energética, titanio y oxígeno totalmente ionizado, en el Laboratorio de Radiación Espacial de la NASA del Laboratorio Nacional Brookhaven de Nueva York.
Estas partículas son muy similares a las encontradas en los rayos cósmicos galácticos que bombardearán a los astronautas durante vuelos espaciales prolongados, indicó el estudio publicado en la revista Scientific Reports que forma parte del Programa de Investigación Humana de la NASA.
Seis meses después de la exposición, los investigadores aún encontraron niveles significativos de inflamación cerebral y daño a las neuronas, dijo Charles Limoli, profesor de oncología de radiación de la Facultad de Medicina de UCI.
Las imágenes revelaron que la red neuronal del cerebro estaba dañada por la reducción de las dendritas y de las espinas de estas neuronas, lo que afectaba la transmisión de señales entre las células del cerebro.
Estas deficiencias fueron paralelas a un desempeño deficiente en tareas de comportamiento diseñadas para poner a prueba la memoria y el aprendizaje.
Además, el equipo de Limoli descubrió que la radiación afectaba "la extinción del miedo", un proceso activo en el que el cerebro suprime asociaciones desagradables y estresantes previas, como cuando alguien que casi se ahoga aprende a disfrutar de nuevo del agua.
"Esta no es una noticia positiva para los astronautas que participen en una misión a Marte de dos a tres años", dijo Limoli.
"El ambiente espacial representa peligros únicos para los astronautas. La exposición a estas partículas puede conducir a una gama de posibles complicaciones del sistema nervioso central que pueden ocurrir durante el viaje espacial o persistir después de él, como por ejemplo diferentes disminuciones en el desempeño, déficits de memoria, ansiedad, depresión y toma de decisiones afectada. Muchas de estas consecuencias adversas para la cognición pueden continuar y progresar a lo largo de la vida".
Una solución parcial en las naves espaciales con rumbo a Marte podría incluir áreas con un escudo protector incrementado, como las secciones usadas para descansar y para dormir, dijo Limoli.
Pero estas partículas energéticas altamente cargadas de todos modos atravesarán la nave, dijo, así que "en realidad no hay forma de escapar de ellas".
El grupo de Limoli también está trabajando en tratamientos preventivos que incluyen compuestos que rescatan los radicales libres y protegen la neurotransmisión.