RIO DE JANEIRO, 5 sep (Xinhua) -- El ministro brasileño de Hacienda, Henrique Meirelles, dijo hoy que la confianza de los consumidores, del comercio y de la industria nacional está creciendo, sin embargo defendió la necesidad de aprobar medidas de ajuste en política económica.
"Mi evaluación es que el Congreso y los parlamentarios se sensibilizaron con la crisis económica, con el gran número de desempleados y con el hecho de que la economía empiece a dar señales de recuperación, exactamente por causa de del cambio de orientación de la política económica", explicó desde China, donde participó en la cumbre del Grupo de los 20 (G20) que concluyó este lunes.
El ministro de Hacienda enfatizó también en la necesidad de esclarecer a los agentes de los mercados financieros internacionales que las reformas estructurales en la economía, especialmente la que altera el límite de los gastos públicos, la cual marcha de una forma "muy rápida".
"Un proceso de cambio constitucional es un proceso que requiere de una discusión, con el tiempo, hay un rito del Congreso (...) Pero la buena noticia es que se está proponiendo cambiar la Constitución. Vamos a romper una dinámica que dura décadas", manifestó el ministro en un comunicado del gobierno brasileño.
El responsable de la economía brasileña también habló sobre el programa de concesiones de empresas estatales que se está preparando y que debe ser anunciado por el gobierno este mes, al recordar que las concesiones de carreteras y aeropuertos a la iniciativa privada, hechas en los últimos años, fueron bien recibidas por la población.
Sobre posibles cambios en los programas sociales, Meirelles subrayó que "el mejor programa social, el más eficaz, es el que crea puestos de trabajo" y resaltó que la intención del gobierno es asegurar la eficacia de los programas sociales.
"Lo que se quiere asegurar es que haya suficientes recursos para ser aplicados de la mejor manera posible, para aquellos que realmente necesitan sus programas sociales", comentó al rechazar los rumores aparecidos que apuntan que el gobierno recortará en programas sociales para reducir costes, dentro del ajuste fiscal que prepara.
