BOGOTA, 18 ago (Xinhua) -- El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, aseguró este jueves a través de 100 emisoras comunitarias de 19 departamentos del país que las zonas de concentración de la guerrilla de las FARC en el proceso de desarme, no afectará la vida de los habitantes pues la Fuerza Pública se encargará de garantizar la seguridad.
Santos explicó que las Zonas Veredales Transitorias de Normalización (ZVTN) en donde se concentraría la guerrilla durante el periodo de desarme, es decir seis meses, se van a ubicar en unas comunidades alejadas de la población y los únicos que necesitarán autorización para salir hacia zonas aledañas serán los rebeldes.
"Los que tienen que pedir permiso durante esos seis meses para salir del sitio desarmados, serán los miembros de las FARC que en un número ya preestablecido y muy limitado podrán salir acompañados de este esquema de monitoreo, pero el resto de los colombianos tienen absoluta libertad, no se les va a afectar su vida para nada en ningún sentido", precisó.
El mandatario aprovechó la oportunidad para elogiar la labor de las Fuerzas Armadas por el trabajo cuidadoso y dispendioso efectuado por más de dos años para tener bien ubicadas estas zonas y bien diseñado el plan que ahora se está poniendo en marcha y que cuenta con la verificación de las Naciones Unidas.
Santos recordó que la semana anterior se efectuaron visitas técnicas a los lugares donde funcionarán las ZVTN y aseguró que los 32 protocolos que se acordaron para que se siguieran en estas zonas transitorias, se han venido cumpliendo al pie de la letra por lo que la población está tranquila al saber exactamente cuál será el procedimiento acordado entre el Gobierno y las FARC en la mesa de conversaciones de La Habana.
"Las Fuerzas Armadas de Colombia serán las encargadas de la seguridad alrededor de esas zonas, porque eso es un punto muy importante. Ahí lo que se acordó es que las propias Fuerzas Armadas, nuestro propio Ejército, la Policía, quienes alrededor de las zonas estarán ubicados manteniendo y garantizando la seguridad de todos los colombianos", dijo.
Por su parte, el comandante general de las Fuerzas Militares, general Juan Pablo Rodríguez, informó que las visitas técnicas de la semana anterior incluyó la labor en la que cartógrafos, topógrafos, analistas de imágenes y expertos en análisis del terreno recogieron información exacta que permitirá adecuar esos puntos para la concentración de la guerrilla y la posterior dejación de las armas.
"Toda la población colombiana debe estar tranquila porque existen protocolos muy rigurosos para estas Zonas Veredales Transitorias", señaló el alto oficial agregando que estas zonas tienen una extensión razonable y unos límites geográficos perfectamente definidos.
Según lo acordado por las partes, en estas zonas los guerrilleros ya no podrán vestir uniformes ni portar sus armas, que deberán ser depositadas en un contenedor vigilado permanentemente por las Naciones Unidas (ONU). Esta se encargará en los primeros 60 días del proceso de llevar un registro de la cantidad y tipo de armas que tienen las FARC.
Seis meses después de la firma del acuerdo final entre las partes, terminaría el proceso de concentración, se terminan las zonas veredales y la ONU se encarga de extraer todo el armamento. Este será fundido con el fin de construir tres monumentos: uno en Colombia, uno en Cuba y otro que deberá escoger el partido político creado por las FARC.
El país se encuentra ahora a la espera de la firma del acuerdo final en la mesa de negociaciones de La Habana y después a la refrendación de los acuerdos por parte de los colombianos quienes deberán votar en un plebiscito si los aceptan o no.
Este proceso de paz que busca ponerle fin al conflicto armado más antiguo del continente y que después de cinco décadas deja alrededor de 8 millones de víctimas, se inició a finales del 2012 en la capital cubana.
