MEXICO, 10 ago (Xinhua) -- México y China tendrán en la cumbre del Grupo de los 20 (G20), en la ciudad china de Hangzhou, un espacio propicio para avanzar en decisiones que impulsen el comercio de productos del campo, dijo a Xinhua el economista Aníbal Zottele.
El coordinador del Centro de Estudios China-Veracruz de la Universidad Veracruzana expuso que la reunión, que se celebrará el 4 y 5 de septiembre, es una oportunidad para que ambos Gobiernos aborden medidas que permitan agilizar la entrada de más productos agroalimentarios mexicanos al gigante asiático.
Zottele expuso que México ha aumentado sus exportaciones a China en los últimos dos años, sin embargo hay frutas y otro tipo de productos que todavía no pueden ser vendidos en comercios o restaurantes chinos porque se carece de los protocolos sanitarios para su ingreso.
"Esta reunión debería servir para avanzar en lo que podemos llamar lo micro, porque a nivel macro todo está muy bien. Hay una alianza estratégica integral, tenemos los protocolos desde el punto de vista comercial y político muy avanzados", señaló.
No obstante, "al nivel de microempresa o de productos todavía hay que dar muchos pasos, que son bastante áridos, pero imprescindibles", sostuvo.
El experto ejemplificó que el limón persa, una variedad sin semillas que se produce en el estado de Veracruz (este), tiene alta calidad y potencial para colocarse entre los consumidores chinos, pero no se puede exportar porque falta zanjar la barrera sanitaria.
Luego de que en 2013 ambas naciones renovaron su relación comercial, el campo mexicano exportó a China productos por un valor de 150 millones de dólares en 2015 y se prevé que este año la cifra se incremente a los 300 millones, según proyecciones divulgadas por el Gobierno federal.
Por ahora la mayor parte de las ventas agroalimentarias al país asiático provienen del aguacate, los productos del mar y el algodón, aunque el tequila mexicano comienza a abrirse camino y el año pasado quedaron firmes los protocolos para la entrada de maíz blanco, lácteos y varias carnes.
Zottele aseguró que el mercado chino es un potencial de negocio para los campesinos mexicanos porque su cada vez más numerosa clase media ha adquirido el gusto por productos de alta calidad, como el café que México puede ofrecerle.
"A China hay que exportarle calidad. No está México en condiciones de ingresar por la vía de cantidad al mercado chino porque la producción de cerdo de México no sé si alcanzaría para el consumo chino", advirtió.
Un mayor comercio con el país que en 20 años tendrá 1.000 millones de habitantes de clase media, según proyecciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), cambiaría el panorama económico de regiones productoras de México, apuntó el experto.
Consideró que, en los últimos años, el comercio bilateral a nivel general se ha tornado una relación de competencia asociativa y complementaria con amplias oportunidades para empresarios de los dos países.
"México tiene una doble oportunidad porque, por un lado, se está volviendo competitivo en productos que pueden ingresar a China e integrarse a la producción de un bien final", expuso.
"Por otro lado -continuó- también empieza a convertirse en un atractivo para los empresarios chinos por la situación geopolítica que México tiene respecto a Estados Unidos y Canadá, pero también respecto a América Latina y Europa".
Zottele estimó que el hecho de que la cumbre anual que reúne a los 19 países desarrollados y emergentes líderes, más la Unión Europea, sea presidida por China es un reconocimiento de que Asia ha ido desplazando a Estados Unidos como el eje del poder industrial mundial.
"China está en condiciones de tener una presidencia real del G20. Ojalá sirva para disminuir la tensión, especialmente en las áreas que ahora están siendo muy críticas", manifestó.