Por Juan Limachi
LIMA, 4 ago (Xinhua) -- Las necesidades inmediatas de los países latinoamericanos abren la tarea de garantizar un crecimiento económico a largo plazo, afirmó hoy el economista jefe para la Región de América Latina y el Caribe del Banco Mundial (BM), Augusto de la Torre.
"Abre espacio para las nuevas tareas y las nuevas tareas tienen grandes vertientes, una de estas es el crecimiento a largo plazo, porque América Latina sigue siendo una región de crecimiento bajo en el largo plazo", anotó en una entrevista con Xinhua.
El alto funcionario del BM dictó en la capital peruana la conferencia "La Macroeconomía del Ciclo de Commodities en América Latina: Espejismos y Dilemas", donde resaltó la importancia de diversificar la economía en la región y depender menos de las materias primas.
De la Torre sostuvo que los países latinoamericanos deben desarrollar una capacidad productiva, con un valor agregado, elemento necesario que le permitirá insertarse en la economía global del siglo XXI.
"Requiere de una capacidad productiva, una capacidad innovadora, una capacidad de aprendizaje, de desarrollo de líneas de negocio, de incorporación a los mercados internacionales y ser parte de las grandes cadenas de valor", expresó.
Con respecto a la deuda social histórica que los países de la región tienen con sus habitantes, el economista jefe del BM sugirió que se debe fortalecer la protección social y construir un mercado laboral moderno.
"En el lado social, creo que hay una tarea relacionada con los sistemas de protección social, de pensiones de salud, que sean compatibles con un mercado laboral más moderno", sostuvo.
De la Torre también enfatizó en la necesidad de que los países latinoamericanos deben crear normas que protejan a los trabajadores, simultáneamente capacitarlos para que puedan adaptarse a los cambios.
"Que protejan al trabajador, pero, a la vez, le den espacio para que el trabajador pueda adaptarse con flexibilidad y con mejor preparación a los cambios de la economía moderna", anotó.
En este sentido, el representante del BM reconoció que en los últimos años, algunos países de la región han comprendido las necesidades de sus poblaciones y han tratado de salvar las brechas sociales entre crecimiento y pobreza.
"Me parece que ha habido un cambio de prioridades en la región desde la macroeconomía y los temas de pobreza, hacia los temas de protección social y a la línea de productividad", expresó.
El alto funcionario de este organismo internacional reiteró que las tareas de los países latinoamericanos son múltiples, pero algunos ya se han adelantado en el pasado y con esta experiencia del pasado debe proyectar una agenda de futuro.
"Son muchas, pero se ha reconfigurado, en el pasado la principal tarea en los años 90 tenía que ver con estabilizar la macroeconomía, evitar crisis financieras y tener un sistema de política macroeconómica más robusto", precisó.
De acuerdo a de la Torre, afortunadamente, en la última década, aprovechando el boom del alto precio de los commodities algunos países de la región han logrado algunas mejoras sensibles en el aspecto social,
"Una tarea pendiente, que solía ser super importante y muy grande en el pasado era la pobreza. Atender a los pobres de una manera más eficiente", dijo al referirse a este flajelo que aún es una carga pesada para algunos países de la región como Perú donde existen 7 millones de pobres.
Para el economista del BM, también es destacable que algunos países hayan puesto en marcha diversos programas sociales para combatir la pobreza, una iniciativa que ha dado buenos resultados en el combate a la pobreza.
"La región ha aprendido de hacerlo de mejor manera, particularmente, a través de estas políticas de transferencia condicionada, que están muy focalizadas en los pobres", agregó.
Para el futuro próximo, De la Torre señaló que dos de las tareas más importantes en la agenda de los gobiernos latinoamericanos debe ser el continuar con la lucha contra la pobreza y fortalecer la estabilidad macroeconómica.
"Estas dos grandes tareas, que es la asistencia directa a los pobres y la estabilización de la macroeconomía son tareas que se han venido cumpliendo, en los cuales estamos mucho más seguros", anotó.
De la Torre, entre otros aspectos, resaltó la necesidad de que los países latinoamericanos aprovechen los ciclos de bonanza económica, cuando mejora la oferta de materias primas en los mercados internacionales, para mejorar sus infraestructuras y desarrollar nuevos aparatos productivos.