MOSCU, 2 ago (Xinhua) -- El despliegue del sistema antimisiles estadounidense Defensa Terminal de Area a Alta Altitud (THAAD, siglas en inglés) en Corea del Sur podría ser un incentivo para la cooperación de seguridad entre Rusia y China, afirmó Sergei Luzianin, director en funciones del Instituto de Estudios del Lejano Oriente de la Academia de Ciencias de Rusia.
Son necesarias nuevas declaraciones conjuntas de naturaleza estratégica sobre la cooperación de seguridad y la protección de la estabilidad regional, indicó el experto.
"No necesitamos hacer alianzas, es suficiente con mantener el formato de asociación y enriquecerlo con nuevas declaraciones conjuntas de naturaleza estratégica", dijo Luzianin a Xinhua en una reciente entrevista.
Añadió que la cooperación técnico-militar bilateral incluía ejercicios conjuntos y podría ampliarse a la arena global, "ya que los dos países funcionan como potencias globales responsables para la paz, la estabilidad y el desarrollo del mundo".
El desarrollo "creativo" de la cooperación de seguridad Rusia-China se basará en los existentes acuerdos, bajo la norma de no dirigirse a una tercera parte, ni cambiar el estatus de las relaciones Rusia-China, señaló.
"El despliegue del nuevo sistema de defensa antimisiles en Corea del Sur es el desafío más serio de los últimos años, especialmente para China y Rusia", indicó el experto, advirtiendo que dicha acción podría ser el inicio de una carrera armamentista en el Noreste de Asia.
"Al dar este paso, los estadounidenses y los surcoreanos intentan ciertamente rodear a los socios estratégicos, Rusia y China, tanto por el norte como por el sur", consideró Luzianin.
Sin embargo, la acción no es intimidatoria, ni tendrá un efecto letal para la asociación estratégica ruso-china, manifestó.
Moscú y Beijing deberán hacer uso de su "enorme potencial de disuasión militar" para contrarrestar las nuevas tensiones que EEUU busca crear en la región, subrayó.
"Los estadounidenses y los surcoreanos temen desencadenar un conflicto, pues son conscientes de que un conflicto conllevaría inevitablemente al caos y la destrucción", puntualizó el experto.
"Por lo tanto, la confrontación continuará dentro del marco de la disuasión mutua", concluyó Luzianin.
