CHENGDU, 17 jul (Xinhua) -- Una osa panda de siete años dio a luz a un cachorro el sábado en el Centro de Conservación e Investigación de Pandas Gigantes de China, pero los cuidadores no saben quién es el padre ni el género de la criatura.
Se trata del primer parto de la madre Shuqin, quien mostró fuertes instintos de maternidad y lactancia, porque abrazó de inmediato a su cachorro y lo ocultó de los cuidadores una vez que terminó el parto.
Los cuidadores sólo pudieron saber que el cachorro estaba sano porque oyeron sus llantos.
Luo Bo, subdirector del centro, señaló que Shuqin se apareó con dos pandas, Jinke y Xiangge, el 19 de marzo. Después de esta fecha se notó un cambio evidente en su apetito, una señal del embarazo de los pandas.
Los cuidadores han venido siguiendo a Shuqin desde el 13 de julio.
Se trata del primer cachorro de oso panda nacido después de un apareamiento natural en el centro en lo que va de año.
La mayoría de los pandas gigantes que viven en cautiverio no son buenos criadores. China ha desarrollado técnicas de apoyo de reproducción para mantener la especie que está bajo grave peligro de extinción. No obstante, sólo un 24 por ciento de las osas panda en cautiverio dan a luz, lo que supone una seria amenaza a la supervivencia de la especie.
Los cachorros de panda nacidos a través de la reproducción artificial suelen ser mellizos e incluso trillizos.
Ahora es la época de reproducción de los pandas gigantes y los expertos del centro están haciendo un gran esfuerzo para cuidar a las madres y sus bebés.
Otras tres osas pandas, Xidou, Cuicui y Meixi, han mostrado señales de estar embarazadas en el centro.
El centro señala que siempre es bienvenido el apareamiento natural, pero si fracasa, intentarán la reproducción artificial. A veces cuando una panda está embarazada, los cuidadores no saben si es resultado de un apareamiento natural o de la reproducción artificial. El linaje del cachorro se decide después mediante pruebas de ADN.
