BRUSELAS, 13 jul (Xinhua) -- El fallo del arbitraje sobre el Mar Meridional de China no resuelve nada y la disputa entre Filipinas y China sólo puede solucionarse mediante un diálogo bilateral, dijo un miembro británico del Parlamento Europeo.
"Se trata de una disputa territorial; creo que este asunto no debería haber ido a La Haya", afirmó el martes a Xinhua Nirj Deva, vicepresidente del Comité de Desarrollo del Parlamento Europeo y presidente del Grupo de la Amistad UE-China de la Eurocámara.
El veredicto del arbitraje, iniciado unilateralmente en 2013 por el anterior Gobierno filipino, fue emitido el martes. China reiteró su posición de que ni acepta ni reconoce el fallo.
Deva señaló que las disputas de soberanía y territoriales están fuera de la jurisdicción de la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar (UNCLOS, siglas en inglés).
El legislador indicó que el expresidente filipino Benigno S. Aquino III tomó "una decisión errónea" al presentar el caso ante La Haya, lo que rompió el propio compromiso hecho por el país en 2002 con la Declaración sobre la Conducta de las Partes en el Mar Meridional de China (DOC).
Según este documento, China y los miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, siglas en inglés) acordaron resolver sus disputas regionales a través de consultas y negociaciones.
Sin embargo, Filipinas, al no consultar a China sobre la participación de una tercera parte, abandonó sus compromisos con la DOC.
La opinión más generalizada es que el arbitraje del caso del Mar Meridional de China sólo servirá para aumentar la tensión en la región, en vez de solventar las disputas. En este sentido, Deva dijo que el fallo "no resuelve nada".
Comentó que la disputa entre Filipinas y China es un asunto de carácter bilateral que solamente puede ser solucionado a través del diálogo y las consultas.
Además, enfatizó que los países ajenos a la región deben respetar los esfuerzos de China y la ASEAN por defender la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China.
Tras indicar que el nuevo presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ha expresado su deseo de entablar un diálogo con China, el destacado eurodiputado pidió a la Unión Europea (UE) un papel constructivo en este proceso.
"Primero, la UE no debería interferir en este tema; segundo, deberíamos alentar tanto como podamos a las dos partes para que se sienten juntas en la mesa de negociación, y discutan sobre los asuntos de interés y preocupación mutuos", dijo.
El Grupo de la Amistad UE-China en el Parlamento Europeo está compuesto por más de 40 legisladores procedentes de al menos siete agrupaciones políticas y más de 20 países.