ROMA, 11 jul (Xinhua) -- Un experto italiano pidió esfuerzos concertados de China y Filipinas para calmar las tensiones regionales por medio de una nueva fase de diálogo sobre las disputas del Mar Meridional de China.
Las disputas marítimas entre China y Filipinas, si no son abordadas adecuadamente, perjudicarán a la región que está "atravesando por un desarrollo económico y social rápido", dijo a Xinhua el analista de desafíos emergentes de la Fundación del Colegio de Defensa de la OTAN, Matteo Bressan, en una entrevista reciente.
Bressan urgió a Manila a que aborde el asunto "de una manera adecuada, para garantizar el crecimiento y la prosperidad regionales y promover las sinergias y la cooperación en lugar de una mayor confrontación" entre los países de la región.
Bressan sugirió a Beijing y Manila comenzar una nueva fase de diálogos mediante medidas de construcción de confianza en las áreas política, económica y cultural, lo que conducirá a la mejoría del clima entre ambas partes.
La disputa del Mar Meridional de China entre Beijing y Manila fue presentada en 2013 de manera unilateral ante la Corte Permanente de Arbitraje (CPA) de La Haya por la administración del ex presidente filipino Benigno S. Aquino III.
Un tribunal de la CPA está a punto de anunciar su decisión sobre el caso el martes.
China asegura que el tribunal de arbitraje no tiene autoridad sobre los casos esencialmente relacionados con la soberanía territorial y la delimitación marítima.
Beijing ha puesto en claro que no aceptará un arbitraje forzado y ha pedido en repetidas ocasiones a Manila que abandonar el caso y recurra a las negociaciones bilaterales para hallar una solución pacífica al problema.
Bressan indicó que la relación entre Manila y Washington es otro factor que afecta la solución de las disputas territoriales entre Filipinas y China.
Este año ha habido una presencia militar estadounidense cada vez más activa en el Mar Meridional de China, y la Armada de Estados Unidos ha realizado una serie de las llamadas "operaciones de libertad de navegación" en la vía estratégica.
Pero el hecho es que China jamás ha amenazado la libertad de navegación y depende del paso seguro de productos por el Mar Meridional de China para su propio desarrollo.
Bressan pidió a Washington y a Beijing que eviten las confrontaciones porque su relación tiene un papel vital para calmar las tensiones regionales.
"Una mejoría en las relaciones China-Estados Unidos podría conducir a una desaceleración y disminución de las tensiones y, en consecuencia, ayudar a promover los diálogos políticos entre las partes involucradas en la disputa", señaló el analista.
