NACIONES UNIDAS, 10 jul (Xinhua) -- El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) afirmó el domingo que varios cascos azules procedentes de China y Ruanda murieron y resultaron heridos en la reciente escalada de los enfrentamientos en Yuba, capital de Sudán del Sur.
Todavía no está confirmado el número exacto de bajas, aunque el Ministerio de Defensa Nacional de China precisó que falleció un soldado chino y otros seis resultaron heridos cuando el vehículo blindado en que viajaban recibió el impacto de un proyectil.
En un comunicado publicado desde la sede de la ONU tras una sesión de emergencia a puerta cerrada sobre Sudán del Sur, realizada el domingo por la tarde (hora local), el CSNU expresó su solidaridad y condolencias a las familias de los cascos azules que murieron o resultaron heridos en los ataques.
El organismo, integrado por 15 países, advirtió de que los ataques contra civiles y contra instalaciones y personal de la ONU pueden constituir "crímenes de guerra" y los asaltantes deben asumir responsabilidades y podrían ser objeto de sanciones.
El CSNU reclamó un final inmediato de los combates en Sudán del Sur, y exigió a su presidente, Salva Kiir, y al vice presidente primero, Riek Machar, que hagan todo lo posible por controlar a sus respectivas fuerzas e implementar sinceramente su acuerdo de paz, "incluido el alto el fuego permanente y el repliegue de las fuerzas militares de Yuba".
También animó a los países de la región, al Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana y a la Autoridad Intergubernamental sobre Desarrollo a que mantengan su compromiso con los líderes de Sudán del Sur para afrontar la crisis.
La Misión de la ONU en Sudán del Sur (UNMISS, siglas en inglés), que actúa bajo una resolución del Consejo de Seguridad de 2014, tiene asignados 13.490 efectivos uniformados, entre ellos cerca de 1.200 policías civiles, más 787 civiles internacionales y 1.215 civiles locales.
El cometido de la UNMISS es proteger a los civiles, en particular a las mujeres y a los niños, contra la violencia. Esto incluye el patrullaje por los lugares donde se asientan los desplazados y los campamentos de refugiados, y la creación de las condiciones para el reparto de la ayuda humanitaria.
También este domingo, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo estar "conmocionado" por los duros enfrentamientos en Yuba, y pidió enérgicamente a los líderes del país más joven del planeta que "hagan todo lo que esté en sus manos" para reducir las hostilidades.
"Esta violencia sin sentido es inaceptable y tiene el potencial de revertir el progreso realizado hasta ahora en el proceso de paz", aseguró Ban en una declaración emitida desde la sede de la ONU a través de su portavoz.
Los combates en Yuba comenzaron el 7 de julio entre los soldados leales a Kiir y a Machar, y en ellos han muerto, al menos, 271 personas.
Sudán del Sur obtuvo la independencia de Sudán el 9 de julio de 2011 después de más de dos décadas de guerra.
En diciembre de 2013, el presidente Kiir acusó al vice presidente primero, Machar, de tramar un golpe de Estado, lo que fue negado por éste último pero condujo a una serie de represalias que dejaron muertos.
En agosto de 2015, Kiir y Machar, que había sido un líder rebelde, firmaron un acuerdo de paz que allanó el camino para la formación de un gobierno transitorio de unidad.