Por Edna Alcántara
MEXICO, 5 jul (Xinhua) -- Con el objetivo de evitar el acoso sexual en el transporte público, principalmente en el metro, las autoridades de la Ciudad de México repartieron este martes cientos de silbatos para que las mujeres los hagan sonar en el momento en que se vean hostigadas.
La medida responde a las quejas públicas de parte de las mujeres que diariamente utilizan el transporte público y que, según denuncian, con frecuencia son víctimas de acoso.
Con la entrega de estos instrumentos, inofensivos pero bastante ruidosos, las autoridades capitalinas pretenden disminuir este tipo de delitos, ya que a través del sonido del silbato las mujeres acosadas pueden llamar la atención a las personas de su alrededor o policías.
No obstante, la medida ha sido criticada por las organizaciones feministas, que consideran que no ofrece la solución del problema.
Esperanza Sosa, una estudiante de nivel medio superior, aseguró en declaraciones a Xinhua que difícilmente podría utilizar este silbato en un vagón del metro en horas de máxima afluencia.
"Creo que la intención podría ser hasta cierto punto buena, pero no es la mejor (...) Cuando vamos en horas pico dentro de un vagón no puedes ni mover las manos a veces. Las cosas a veces suceden muy rápido y pasan a veces los hombres muy cerca de una", explicó Sosa.
Desde temprana hora de este martes en seis estaciones de la red del metro y juzgados cívicos, funcionarios, trabajadoras y voluntarias de la Ciudad de México que se identificaban con un chaleco color rosa entregaron cientos de silbatos de manera gratuita bajo del programa #ViveSegura.
El único requisito es que las mujeres que lo solicitan llenen un formulario. De inmediato, se les entrega su silbato dentro de una bolsa y sujetado con un cordón para que se pueda colgar en el cuello, tal y como constató Xinhua durante un recorrido.
El silbato se entrega acompañado de un folleto que explica a la usuaria en qué casos usarlo, le ofrece teléfonos para solicitar servicios de atención y contiene el listado de la Fiscalía Especializada en Delitos Sexuales, a donde deberá acudir en caso de haber sufrido una agresión sexual, señaló el Gobierno de la Ciudad de México en un comunicado.
"Sonar el silbato es el primer paso para solicitar ayuda. Posteriormente se puede levantar una denuncia cuando se trata de acoso o abuso sexual y el agresor debe ser trasladado a una Agencia de la Fiscalía Especializada en Delitos Sexuales", apuntó el Gobierno local.
No obstante, aclaró que el silbato es una medida complementaria a una serie de estrategias que tienen que ver con el tema de seguridad hacia las mujeres. En esa línea, apuntó que ha aumentado la vigilancia de cámaras de seguridad y colocado botones de alarma en autobuses y espacios públicos, entre otras medidas.
"Creo que me siento un poco más segura, pues aunque existen vagones especiales para mujeres a veces no alcanzas lugar y tienes que ir con los hombres", dijo Jimena Martínez, quien solicitó su silbato.
El pasado 5 abril, un grupo de mujeres, ataviadas de negro y con el rostro cubierto con un velo, protestaron en silencio en una estación del metro de la Ciudad de México contra el acoso y hostigamiento sexual del que son víctimas, luego de que una joven usuaria denunciase en las redes sociales haber sufrido una agresión sexual en un vagón destinado para mujeres.