HOUSTON, 10 jun (Xinhua) -- El incremento de la tensión en el Mar Meridional de China no es un incidente aislado, sino el resultado de la política de Estados Unidos de "pivotar hacia Asia", indicó Peter Li, profesor asociado de la Universidad de Houston-Downtown, en una entrevista con Xinhua.
"Asia Oriental ocupa, en particular, una posición estratégica en la política exterior de Estados Unidos y tenemos que entender que esa política ha estado siempre basada en un cálculo astuto en función de los intereses estadounidenses", dijo el profesor.
Recordó que "por ejemplo, en 1947, fue EEUU el que ayudó al Gobierno chino a recuperar las islas del Mar Meridional de China. Sin embargo, hoy al parecer ha cambiado su posición".
"Este cambio, basado en una nueva comprensión de la situación en Asia Oriental y la creciente pujanza china, transmite un mensaje claro a los países que tienen disputas territoriales con China, como es el caso de Filipinas", señaló.
Al fortalecer sus relaciones con Filipinas, Washington le está aparentemente diciendo a Manila que apoya sus acciones en el Mar Meridional de China.
Promoviendo la alianza con sus aliados en la región, fortaleciendo nuevas relaciones con los países de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y consolidando los actuales lazos de seguridad sirven al objetivo estratégico de Washington de neutralizar la posición de Beijing en la región, dijo Li.
"Por parte de Estados Unidos, China podría verse metida en conflictos prolongados y tener que desviar recursos para las preparaciones militares, lo que afectaría a la vida del pueblo", comentó.
A su juicio, "las acciones marítimas de EEUU en la región han transmitido un mensaje claro a las partes implicadas en la disputa: que Washington tiene una posición contraria a China. En mi opinión, la toma de partido de Estados Unidos en el conflicto del Mar Meridional de China beneficia y perjudica sus objetivos".
En este sentido, indicó que la escalada del conflicto en la región, que tendrá un efecto negativo, envenenará la atmósfera necesaria para la colaboración entre Estados Unidos y China en otros asuntos esenciales para mantener la paz y la estabilidad en Asia y el mundo.
"Las tensiones resultantes entre Washington y Beijing pueden interrumpir muchas otras áreas importantes de colaboración entre los dos países, entre ellas, la paz y la estabilidad en la Península Coreana, la no proliferación nuclear, el antiterrorismo, la cooperación en seguridad, el cambio climático y la estabilidad financiera internacional", señaló.
Li se mostró de acuerdo con las declaraciones del presidente chino, Xi Jinping, sobre que tanto China como Estados Unidos deben dar pasos proactivos para resolver la crisis con un espíritu de respeto mutuo a fin de convertir el Pacífico en una plataforma para la cooperación, la paz y la prosperidad.
Además, el profesor manifestó que hay que entender que existan discrepancias entre Estados Unidos y China, pero subrayó que ambos países saldrán ganando si trabajan por un objetivo común: la paz y la estabilidad en el Sudeste Asiático y, específicamente, el Mar Meridional de China.
