BUENOS AIRES, 6 jun (Xinhua) -- El seleccionado argentino de fútbol cumplió con lo que había propuesto en su debut, este lunes, en la Copa América Centenario, en Estados Unidos, ante un rival difícil como Chile: ganar.
Y lo hizo con autoridad, ya que el 2-1 terminó siendo exiguo por una falla del portero Sergio Romero, quien salió a cortar un centro en el último instante del partido y José Fuenzalida aprovechó para descontar.
Ante el vigente campeón, que lo había dejado sin festejo el año pasado en una final reñida con desenlace en los penaltis, en Santiago, Argentina mostró personalidad y dominó el juego.
Además, lo consiguió sin su astro, Lionel Messi, aquejado por un golpe en la cadera, una ausencia que generaba dudas sobre el funcionamiento colectivo del elenco dirigido por Gerardo Martino.
Esta victoria le da aire al entrenador para no apurar al capitán para el próximo compromiso, por la segunda fecha del Grupo D, ante Panamá, que más temprano venció 2-1 a Bolivia.
Los mejores momentos del combinado albiceleste se dieron en la segunda etapa, de la mano de su mejor jugador en la calurosa tarde en Santa Clara: Angel Di María.
El centrocampista ofensivo abrió el marcador con una corrida marca registrada y Ever Banega luego amplió la cuenta.
Sin Messi, el encargado de elaborar el juego fue el ex Boca Juniors Nicolás Gaitán, que levantó mucho su rendimiento en el segundo tiempo, al igual que Augusto Fernández.
Gonzalo Higuaín, figura del Nápoles de Italia, estuvo aislado en el ataque, pero se las arregló para complicar a la defensa trasandina.
En el fondo, Argentina exhibió algunas dudas en la zaga central (Nicolás Otamendi-Ramiro Funes Mori), pero no pasó mayores contratiempos: sólo se complicó por la habilidad de Alexis Sánchez.
Romero, en tanto, había tenido un encuentro sin sobresaltos, pero el yerro del final manchó su actuación.
Si el subcampeón del mundo en Brasil 2014 repite este nivel, seguramente tendrá mayores posibilidades de terminar con esta racha negativa de 23 años sin títulos: el último fue en la Copa América de Ecuador 1993.