BUENOS AIRES, 19 may (Xinhua) -- El partido opositor argentino Frente para la Victoria de la ex presidenta Cristina Fernández (2007-2015), consiguió aprobar y convertir hoy en ley la iniciativa que declara la "Emergencia Ocupacional" e impide despidos en los ámbitos público y privado por 180 días.
La norma, que contaba con la media sanción del Senado, fue aprobada la madrugada de este jueves en la Cámara de Diputados de Argentina con 147 votos a favor, tres en contra y 88 abstenciones, todas del partido gobernante Cambiemos.
El presidente argentino, Mauricio Macri, ha dicho que vetará la iniciativa, que contó con el respaldo del espacio Frente Renovador.
El jefe del Gabinete de Ministros, Marcos Peña, ratificó la intención de Macri de vetar la norma, al desestimar que "esta herramienta legislativa ayude a los trabajadores".
A su vez, el jefe del bloque Frente para la Victoria, Héctor Recalde, alertó que "hay muchos despidos y esto tiene que ser un mensaje. Si el presidente la veta va a existir otro veto, el veto de los trabajadores", anticipó.
Por su parte, Mario Negri, jefe de la bancada de Cambiemos, sostuvo que la norma "no va a resolver el problema del desempleo".
En su artículo 1, la ley establece "la emergencia pública en materia ocupacional por el término de 180 días en todo el territorio nacional" y prohíbe "por ese término los despidos o suspensiones de trabajadores sin justa causa, tanto en el ámbito público como en el ámbito privado".
En caso de producirse despidos, los trabajadores afectados podrán optar por accionar judicialmente su reinstalación en el puesto de trabajo o convalidar la extinción del vínculo, que en dicho caso tendrán derecho a percibir el doble de las indemnizaciones de estilo.
Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) en el país se produjeron más de 120.000 despidos desde que asumió el gobierno en diciembre último el presidente Macri.
Consultado por Xinhua, el director del Centro de Investigación de Políticas Públicas de la Fundación Libertad y Progreso, Agustín Etchebarne, censuró la iniciativa porque agrega "costos a las empresas, justo cuando están en un mal momento. Es una tontería", lamentó.