GINEBRA, 12 may (Xinhua) -- La Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló hoy que los países de ingresos bajos y medios están soportando la mayor carga de la contaminación del aire que causa alrededor de tres millones de muertes prematuras al año en todo el mundo.
Las cifras reveladas por la base de datos de contaminación del aire de la OMS muestran que el 98 por ciento de las ciudades con más de 100.000 habitantes en los países de ingresos bajos y medios no cumplen con los lineamientos de calidad del aire establecidos.
La cantidad disminuye a 56 por ciento cuando se mide la situación cualitativa en los países de ingresos elevados.
Esto es preocupante debido a que una caída en la calidad del aire urbano incrementa los riesgos de apoplejía, enfermedades coronarias, cáncer de pulmón y enfermedades crónicas y respiratorias agudas, incluido el asma, en la gente que inhala contaminantes como sulfatos, nitratos y carbón negro sobre una base cotidiana.
Esto es particularmente peligroso pues la materia pequeña y fina penetra profundo en los pulmones y el sistema cardiovascular.
Las tendencias muestran también que aunque la conciencia está aumentando, la situación sigue mostrando pocas señales de mejoría.
La cifras derivadas del estudio que comparan a 795 ciudades en 67 países muestran que la contaminación global del aire urbano aumentó 8 por ciento entre 2008 y 2013, con los niveles más elevados en los países de ingresos bajos y medios en las regiones del este mediterráneo y el sureste asiático de la OMS.
Los niveles anuales promedio en esas áreas a menudo superaron los límites de la OMS entre cinco y 10 veces, seguidas por las ciudades de bajos ingresos en la región del oeste del Pacífico.
El informe también descubrió que los niveles hallados en la contaminación del aire urbano ha incrementado en más de 5 por ciento en más de dos terceras partes de las ciudades del este del Mediterráneo, las regiones del sureste de Asia y los países de bajos ingresos de la región del oeste del Pacífico.
En vista de esto, la directora del departamento de salud pública y ambiente de la OMS, Maria Neira, advirtió que la situación es altamente problemática.
"La contaminación del aire urbano continua al alza a una tasa alarmante, lo que hace estragos en la salud humana", dijo la funcionaria.
"Al mismo tiempo, la conciencia está aumentando y más ciudades están supervisando su calidad del aire. Cuando la calidad del aire mejore, las enfermedades respiratorias y cardiovasculares globales disminuirán", señaló Neira.
La Asamblea Mundial de la Salud de este año, que se realizará del 24 al 30 de mayo, permitirá que los 194 países miembros discutan estrategias para mejorar la respuesta de la comunidad mundial a esta calamidad global.