MEXICO, 9 may (Xinhua) -- La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE, ministerio) de México informó el lunes que iniciará el análisis de solicitud de extradición a Estados Unidos del narcotraficante mexicano Joaquín Archivaldo "El Chapo" Guzmán Loera, al contar con la opinión jurídica de su país, que ve viable cumplir con el procedimiento internacional.
En un comunicado, la Cancillería precisó que fue el Juez Tercero de Distrito de Procesos Penales Federales en la Ciudad de México, quien notificó hoy a este ministerio su opinión jurídica respecto a lo actuado y probado en el procedimiento de extradición internacional que se le siguió a Joaquín Archivaldo Guzmán Loera y ahora se tomará 20 días hábiles para analizar el caso, tal como lo establece la Ley de Extradición Internacional.
"Es importante señalar que el gobierno de México no analizará la culpabilidad o inocencia del reclamado en los delitos que le son imputados en otro país, sino que únicamente se verificará que se cumplan los requisitos del tratado bilateral aplicable para la procedencia o no de la petición de conformidad con nuestro marco jurídico constitucional, con respeto a los derechos humanos y en seguimiento a los principios de política exterior", puntualizó.
El 16 de junio y el 31 de agosto de 2015, el gobierno estadounidense presentó ante la SRE de México las peticiones formales de extradición de Guzmán Loera, por los delitos de asociación delictuosa para importar y poseer con la intención de distribuir cocaína, delincuencia organizada, narcotráfico, lavado de dinero, homicidio y posesión de armas de fuego, entre otros.
El capo fue recapturado el 8 de enero pasado en Los Mochis, perteneciente al norteño estado de Sinaloa y fue nuevamente encarcelado en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el central estado de México, justo donde seis meses previos escapó de un túnel.
No obstante, el sábado pasado, fue trasladado a la prisión federal de la fronteriza Ciudad Juárez, lo que, de acuerdo con las autoridades federales, se debió por motivos de remodelación del Altiplano y no para preparar su extradición al país vecino.
Guzmán Loera, en complicidad de funcionarios penitenciarios, se escapó la noche del 11 de julio de 2015, por un boquete del área de regadera de su celda, número 20 del Centro Federal de Readaptación Social Número 1 del Altiplano, lo que constituye el segundo escape del narcotraficante de una cárcel de máxima seguridad en México; el primero, en 2001 en Puente Grande, a las afueras de Guadalajara (oeste de México).