BEIJING, 29 abr (Xinhua) -- Una portavoz del gobierno de China criticó hoy las declaraciones hechas por el secretario adjunto de Estado de Estados Unidos Antony Blinken en relación con el inminente "arbitraje" del asunto del Mar Meridional de China y dijo que Estados Unidos no está en posición de criticar a China.
El jueves, Blinken declaró en una audiencia de la Cámara de Representantes en Washington que China "no puede seguir ambas vías" de ser parte de la convención pero rechazar sus disposiciones, incluyendo "la naturaleza obligatoria de cualquier decisión de arbitraje".
El funcionario estadounidense se refería a un caso presentado por Filipinas para iniciar procedimientos de arbitraje obligatorio respecto a la "jurisdicción marítima" en el Mar Meridional de China.
"Lamentablemente, tengo que señalar que el señor Blinken podría estar mal informado acerca de la esencia de las disputas en el Mar Meridional de China y del contenido de la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar, o bien está etiquetando injustamente a China de manera deliberada", indicó la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores, Hua Chunying, en una sesión de prensa diaria.
China ha reiterado que no aceptará ni participará en el arbitraje promovido por Filipinas.
Hua mencionó hoy que el asunto del Mar Meridional de China tiene que ver con la soberanía territorial y la delimitación marítima. Filipinas está negando la soberanía territorial de China sobre algunas islas y arrecifes, así como sus derechos marítimos en el Mar Meridional de China.
En 2006, China presentó una declaración, de acuerdo con la convención, para excluir las disputas relacionadas con la delimitación marítima del arbitraje obligatorio y de otros procedimientos obligatorios de solución de disputas. Más de 30 países han presentado declaraciones de este tipo.
Esas declaraciones son parte integral de los procedimientos de solución de disputas de la convención, y tienen efecto vinculante sobre todos los firmantes.
"Por lo tanto, las llamadas peticiones de Filipinas no se clasifican como disputas que puedan ser sometidas a un arbitraje obligatorio, y el establecimiento del tribunal [por solicitud de Filipinas] es por sí mismo infundado", afirmó Hua.
La decisión de China de no aceptar ni participar en el arbitraje confirma la seriedad de la convención y de otras leyes internacionales, así como su oposición a cualquier mal uso de ellas, explicó la portavoz.
Hua indicó que Estados Unidos no ha firmado la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar.
En 1979, Estados Unidos estableció el programa de Libertad de Navegación antes de la firma de la convención en un intento por dominar el orden marítimo más allá de la convención, mencionó Hua. Esto refleja la "lógica de hegemonía" de Estados Unidos en su manejo del derecho internacional, el cual utiliza cuando le es conveniente y lo abandona en condiciones desfavorables.
"Sobre este asunto, Estados Unidos no tiene ninguna autoridad para señalar a China", agregó. Fin