BEIJING, 22 abr (Xinhua) -- La tasa de desempleo registrada en las zonas urbanas de China se situó en el 4,04 por ciento a finales de marzo, una bajada frente al 4,05 de finales de 2015, informó hoy viernes el Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social.
Se crearon 3,18 millones de trabajos urbanos adicionales en los tres primeros meses de 2016, indicó el portavoz de la cartera, Li Zhong, en una conferencia de prensa.
"Los datos indican que el mercado laboral de China permanece estable", manifestó Li, que atribuyó el incremento en el número de puestos de trabajo y la baja tasa de desempleo principalmente al "crecimiento económico más lento pero razonable, la profundización de la reforma del gobierno y la campaña de innovación, así como a las políticas favorables al empleo".
La economía china continuó ralentizándose en el primer trimestre del año, en el que el producto interno bruto (PIB) creció un 6,7 por ciento interanual, hasta alcanzar 15,9 billones de yuanes (2,4 billones de dólares). No obstante, la cifra se mantuvo en línea con las expectativas del mercado y dentro del rango establecido como objetivo por el gobierno, de entre un 6,5 y un 7 por ciento para 2016.
"Dado que la economía nacional está bajo una creciente presión a la baja y la reforma estructural se está profundizando, la situación del empleo es un resultado que ha sido difícil de lograr", destacó un profesor de la Universidad de Negocios y Economía Internacional, Li Chang'an.
Crear más puestos de trabajo es una de las prioridades de los esfuerzos del gobierno chino con el fin de mantener estable el empleo, pues millones de trabajadores se enfrentan a la redundancia durante el proceso de fusiones de empresas y reorganizaciones de industrias con exceso de capacidad.
China tiene como objetivo proporcionar más de 10 millones de nuevos trabajos urbanos en 2016 y mantener la tasa de desempleo urbano por debajo del 4,5 por ciento, según el informe sobre la labor del gobierno presentado ante la sesión anual parlamentaria celebrada en marzo.
El gobierno ha desarrollado varias medidas y políticas para mantener el empleo estable y evitar despidos masivos mientras se recorta el exceso de capacidad, indicó Li, que añadió que la ralentización de la economía y la reforma estructural suponen desafíos.
A las autoridades locales se les ha pedido que den prioridad a los derechos e intereses de los empleados de empresas y den pasos efectivos para que los trabajadores despedidos encuentren otro empleo, puesto que se está eliminando un exceso de capacidad de millones de toneladas en el sector del acero y el carbón, según Li.
Para amortiguar el efecto de la pérdida de puestos de trabajo en las familias y en la sociedad, el gobierno central destinará 100.000 millones de yuanes (15.400 millones de dólares) a ayudar a los trabajadores despedidos a encontrar un nuevo trabajo, anunció en marzo el primer ministro chino, Li Keqiang.