QUITO, 21 abr (Xinhua) -- El presidente de Ecuador, Rafael Correa, recorrió hoy la provincia de Esmeraldas, y otras de las más afectadas por el terremoto que devastó la zona costera del país el sábado 16 de abril.
El mandatario informó en su cuenta de Twitter su regreso a las zonas afectadas, esta vez, en Esmeraldas, luego de que entre el domingo y el martes último visitó la vecina provincia de Manabí (oeste), la más castigada por la catástrofe.
"Mi gratitud a todos. Después del desconcierto de las primeras horas, el país ha reaccionado muy bien. Ya todas las zonas afectadas son atendidas con salud, agua, víveres y seguridad pública. Continúa rescate de cuerpos y, ojalá, de sobrevivientes", afirmó el mandatario en la red social.
Agregó que el gobierno empezará a instalar adecuados campamentos para personas que perdieron sus casas, debido a que la reconstrucción "será larga, pero juntos superaremos esta tragedia".
Según el último balance de la Fiscalía General del Estado, la cifra de muertos alcanza los 570, 13 de ellos, extranjeros de varias nacionalidades.
Correa dijo la víspera que las cifras de fallecidos "están cambiando minuto a minuto" y dijo que "lastimosamente aumentará, pero cada vez a un ritmo menor porque ya se han rescatado a muchos cadáveres".
Según datos preliminares, 54 personas han sido rescatadas entre los escombros.
Además, hasta la tarde del miércoles, el gobierno informó que existen 5.733 heridos y 163 desaparecidos.
Por su parte, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos señaló que hay 21.835 personas albergadas, 1.116 edificaciones destruidas y 146 escuelas afectadas.
A ello se suma, la destrucción de carreteras y puentes en las poblaciones situadas en la costa del Océano Pacífico.
La ayuda internacional, del gobierno, así como de instituciones y del pueblo ecuatoriano, volcado a recolectar víveres y vitualles, continúa llegando a los miles de damnificados.
La víspera, el secretario adjunto de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Stephen O'Brien, recorrió las zonas devastadas en la costa norte de Ecuador, y anunció que se solicitará a la comunidad internacional una colecta urgente por 73 millones de dólares para asistir a los afectados.
Los rescatistas continúan con la tenaz labor de búsqueda de sobrevivientes entre los escombros, en medio del drama humano de quienes buscan a sus familiares desaparecidos.
Además de Manabí y Esmeraldas, fueron afectadas por el terremoto las provincias de Guayas, Los Ríos, Santa Elena y Santo Domingo de las Tsáchilas.
En el país sudamericano se mantiene le tensión y el nerviosismo por la cadena de réplicas que ocurren casi de manera sucesiva, según reportes continuos del Instituto Geofísico.
Este jueves, se registró una réplica de magnitud 4,6 grados Richter cerca de la costa de Ecuador, entre las localidades manabitas de Bahía de Caráquez y Pedernales, que fue epicentro del terremoto del sábado anterior.
Según el Instituto Geofísico el sismo ocurrió a las 7h31 hora local (12h31 GMT) a una profundidad de 7.05 kilómetros.
Medios locales reportaron que el temblor se sintió en poblaciones de la costa ecuatoriana, donde los pobladores aún con miedo de que ocurran nuevas réplicas de mayor intensidad se mantienen en vigilia en las calles.
El miércoles ya ocurrieron réplicas de magnitud 6,1 y 6,3 grados Richter que generaron pánico y alarma en la población.