BEIJING, 21 abr (Xinhua) -- China lanzará al espacio en el tercer trimestre de este año su segundo laboratorio espacial, el Tiangong-2, con condiciones más habitables para los astronautas, anunció hoy el portavoz de la Academia de Tecnología Espacial de China (ATECh), Wang Zhongyang.
El nuevo laboratorio espacial consistirá de una cabina de experimentos sellada herméticamente, diseñada para ofrecer a los astronautas aire limpio, temperatura y humedad apropiados y un módulo de recursos equipado con alas, baterías y combustibles solares para los propulsores, dijo el portavoz.
"Modificamos especialmente el interior del nuevo laboratorio espacial para volverlo más habitable para estancias intermedias de nuestros astronautas", declaró Wang, antes del Día del Espacio, que se conmemora en China el 24 de abril para celebrar el lanzamiento del primer satélite chino hace 46 años.
El Tiangong-2 es el segundo laboratorio espacial de China diseñado para llevar a cabo experimentos científicos y pruebas de reparación espaciales a fin de preparar el camino para la primera estación espacial orbital del país, que se prevé esté en servicio alrededor del 2022.
El Tiangong-1, lanzado en septiembre de 2011 con una vida prevista de dos años, terminó su servicio de datos a principios de este año después de una órbita de operación de 1.630 días, durante la cual se acopló a las naves espaciales Shenzhou-8, Shenzhou-9 y Shenzhou-10 y emprendió una serie de experimentos.
"A diferencia del Tiangong-1, el Tiangong-2 será nuestro primer laboratorio espacial genuino", dijo Wang.
El Tiangong-2 se acoplará a la nave espacial Shenzhou-11, que se espera despegue en el cuarto trimestre con dos astronautas hombres a bordo para una misión de 30 días en el nuevo laboratorio espacial antes de volver a la Tierra.
Los astronautas están recibiendo entrenamiento.
En 2017, el Tiangong-2 se acoplará a la primera nave espacial de carga de China, la Tianzhou-1, que será lanzada en el primer semestre del año próximo a bordo del cohete Gran Marcha-7 de próxima generación. Durante el proceso, los científicos verificarán tecnologías clave como reabastecimiento de combustible de propulsión.
Las misiones espaciales de miles de millones de dólares de China se han vuelto una fuente de creciente orgullo nacional y en un hito en la estatura global y experiencia técnica de China.
El país envió a su primer astronauta al espacio en 2003, la tercera nación después de Rusia y de Estados Unidos en lograr de forma independiente un viaje espacial tripulado. En 2008, los astronautas a bordo de la Shenzhou-7 realizaron la primera caminata espacial de China.