BEIJING, 14 abr (Xinhua) -- Los "Cinco de Shanghai", un mecanismo que resolvió exitosamente disputas y mantuvo la tranquilidad de las áreas fronterizas entre las naciones participantes, sirve como modelo para asuntos similares, señalaron expertos.
Los expertos sostuvieron lo anterior en un simposio de dos días en el que se conmemoró el vigésimo aniversario de la firma en Shanghai el 26 de abril de 1996 del acuerdo histórico sobre Construcción de Confianza en el Campo Militar en Áreas Fronterizas entre China, Rusia, Kazajistán, Kirguizistán y Tayikistán.
El acuerdo estipula que fuerzas militares de los cinco países no deben atacarse mutuamente, no deben llevar a cabo ejercicios destinados contra el otro, sino informarse mutuamente sobre el alcance de sus ejercicios y establecer relaciones amistosas.
El acuerdo marcó el inicio de la solución de la líneas fronteriza que se extienden a lo largo de más de 7.000 kilómetros, un proceso que se aceleró con otro pacto: el acuerdo sobre la Reducción Mutua de Fuerzas Militares en Áreas Fronterizas entre China, Rusia, Kazajistán, Kirguizistán y Tayikistán, el cual fue firmado en Moscú el 24 de abril de 1997.
"Los dos acuerdos no tienen precedente, los cuales convirtieron las áreas fronterizas algunas vez conflictivas en zonas pacíficas que incluso sirven como vínculo de amistad entre países fronterizos", comentó el delegado permanente de Kazajistán en la Secretaría de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS), Erik Ashimov.
El Espíritu de Shanghai, caracterizado por la confianza y beneficio mutuos, la equidad, las consultas, el respeto por las diversas civilizaciones y el desarrollo compartido, no sólo estableció las bases para el mecanismo de los "Cinco de Shanghai", sino que además sirvió como valor esencial para el posterior desarrollo de la OCS.
"Bajo ese espíritu, China ha resuelto disputas fronterizas con 12 de 14 Estados fronterizos. Firmamos 29 tratados sobre arreglo de fronteras y confirmamos líneas fronterizas en más de 20.000 kilómetros, lo cual representa 90 por ciento de la línea fronteriza terrestre de China", señaló el viceministro de Relaciones Exteriores de China, Liu Zhenmin.
"Todos los países participantes tienen el compromiso y la auténtica devoción de resolver conflictos a través de la negociación y el diálogo, lo que ha llevado al exitoso resultado", dijo Sheng Shiliang, investigador del Centro Xinhua de Estudios sobre Asuntos Mundiales.
La solución pacífica de asuntos fronterizos entre las cinco naciones ha demostrado que la negociación y el diálogo funcionan bien mientras los países correspondientes alberguen la sinceridad para poner fin a las tensiones.
Los comentarios de Sheng tuvieron eco en el ministro consejero de la embajada de Rusia en Beijing, Evgeny Tomikhin, quien hizo hincapié en la confianza y el beneficio mutuos señalando que "debemos ver por los intereses de los otros, así como de los propios".
Un foro destinado a reducir la hostilidad a lo largo de las líneas fronterizas, el mecanismo se ha convertido en un nuevo nicho de cooperación regional en las áreas de política, seguridad, aplicación de la ley y economía.
Por ejemplo, con el fin de fortalecer el apoyo mutuo para proteger la unidad nacional y la soberanía, y resistir todo tipo de amenazas para la seguridad de la región, el grupo los "Cinco de Shanghai" acordó que sus ministros de Defensa se reúnan anualmente y sus ejércitos deben ser más activos en la realización de ejercicios conjunto y entrenamiento, intercambio de información acerca de operaciones de pacificación, y organizar conferencias y otros intercambios.
Luego de las reuniones de 1996 y 1997, las subsecuentes cumbres anuales del grupo los "Cinco de Shanghai" tuvieron lugar en Almaty, Kazajistán, en 1998, en Bishkek, Kirguizistán, en 1999, y en Dushambé, Tayikistán, en 2000.
En la cumbre de Dushambé, los miembros acordaron "oponerse a la intervención en asuntos internos de otros países bajo los pretextos del 'humanitarismo' y 'la protección de los derechos humanos,' y apoyar los esfuerzos de los otros para salvaguardar la independencia nacional, la soberanía, la integridad territorial y la estabilidad social de los cinco países".
En 2001, la cumbre anual regresó a Shanghai, donde las cinco naciones miembro incluyeron por primera vez a Uzbekistán en el mecanismo los "Cinco de Shanghai". Para junio de ese año, los seis países adoptaron la Declaración de la OCS, haciendo que el mecanismo de los "Cinco de Shanghai" ascendiera a un nivel superior de cooperación internacional.
En los más de 20 años pasados, la cooperación entre las naciones de los "Cinco de Shanghai" se ha extendido desde la seguridad hasta un amplio espectro de áreas como comercio, economía y asuntos internacionales y regionales de interés común.
El consejero del Departamento de Asuntos Fronterizos y Oceánicos del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenli, declaró que China ha firmado muchos tratados con sus cuatro vecinos, quienes acordando abrir 103 pares de puertos, de los cuales, 74 pares ya fueron abiertos.
"Construimos muchas instalaciones transfronterizas como autopistas, vías ferroviarias, oleoductos y gasoductos, y líneas de transmisión. Además, muchas zonas de cooperación económica transfronteriza desempeñan un papel vital en la promoción de relaciones de negocios entre naciones vecinas y elevan los estándares de vida de las personas que viven en esas áreas", señaló Wang.
Gracias al mecanismo de los "Cinco de Shanghai", los anteriores frentes altamente cautos que solían ser lugares relativamente salvajes, se han convertido en centros de cooperación económica y comercial caracterizados por una amistosa comunicación y un profundo entendimiento mutuo.
