Por Matthew Rusling
WASHINGTON, 12 abr (Xinhua) -- La perturbación externa causada por una débil economía global impactaría de manera negativa en la economía de Estados Unidos, advirtieron expertos estadounidenses.
Esto sucede cuando el Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó el martes sus perspectivas de crecimiento global por cuarta vez este año, al 3,2 por ciento del 3,4 por ciento de enero, citando factores como las deprimidas economías avanzadas y los bajos precios del petróleo.
El FMI, cuyas reuniones de primavera están previstas para finales de esta semana en Washington, advirtió de grandes riesgos de estancamiento económico y vulnerabilidad ante perturbaciones como los conflictos geopolíticos y las depreciaciones monetarias.
"EEUU está muy integrado en la economía global a través tanto del comercio como de los mercados financieros internacionales. Por ello, la previsión global de la economía y el mercado financiero tiene un gran peso en la previsión de la economía estadounidense", manifestó a Xinhua Desmond Lachman, investigador residente del American Enterprise Institute.
Todo depende de cuán severa sea la desaceleración global y si los mercados financieros internacionales se ven afectados o no por perturbaciones provocadas por situaciones como el "Brexit", salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE), expresó Lachman, refiriéndose a un referéndum previsto para junio en Reino Unido para determinar si debe abandonar el bloque regional.
En realidad, el FMI señaló el martes que el llamado "Brexit" dificultaría los vínculos comerciales y causaría "importantes desafíos" para Reino Unido y la UE.
De ocurrir alguno de estos eventos, la economía estadounidense sentiría indudablemente el impacto, precisó el investigador.
A la pregunta sobre el peor escenario posible, Lachman reconoció que sería que la economía estadounidense se viera afectada por una perturbación externa como el "Brexit".
"La razón que me preocupa respecto al resto de la economía mundial es que actualmente tenemos una inusual confluencia de riesgos externos, muy altos niveles de deuda en una serie de países clave, y un espacio limitado para la reacción política ante una perturbación externa", apostilló.
"Por esa razón, considero que la FED (Reserva Federal de EEUU) hace lo correcto al no apresurarse a elevar las tasas de intereses estadounidenses", opinó, en referencia a la reticencia de la FED a incrementar dichas tasas.
POLITICOS INSENSATOS PUEDEN ANIQUILAR A LA ECONOMIA ESTADOUNIDENSE
Mientras, otros economistas dibujan un panorama más favorable de la economía estadounidense, aunque advierten de que la elección del candidato político equivocado -y aclaran que hay muchas elecciones malas- puede tener un impacto desastroso en la economía estadounidense.
Barry Bosworth, miembro del Instituto Brookings, dijo a Xinhua que el mayor riesgo "puede ser las insensatas posiciones políticas de la mayoría de los candidatos presidenciales".
La excepción es la favorita de la parte demócrata, Hillary Clinton, subrayó.
"Pero la elección de (Bernie) Sanders, (Donald) Trump o (Ted) Cruz puede tener implicaciones muy negativas para la economía estadounidense y la mundial. EEUU está experimentando una importante ola de populismo antiglobal", dijo.
Tanto Trump como Clinton lideran actualmente las primarias de sus partidos, pero Cruz sigue presente y Sanders está demostrando ser un digno contendiente para Clinton.
LA SALUD DEL MERCADO LABORAL DE EEUU
Sobre la situación del empleo en EEUU, aunque no es el aspecto más brillante según las normas estadounidenses, se muestra mucho más saludable que en muchas otras naciones, coincidieron expertos.
Pese a que el mercado laboral de EEUU no se ha recuperado completamente desde la recesión económica global de 2008, Lachman lo calificó de "relativamente bueno, especialmente en comparación con el de Europa".
"Mientras que el desempleo general en EEUU ha caído de más del 10 por ciento hasta por debajo de un 5 por ciento durante los últimos seis años, la cifra en Europa permanece por encima del 10 por ciento... Diciendo esto, uno debe sentirse decepcionado por las bajas tasas de participación en EEUU y el elevado número de trabajadores desalentados. Eso sí deja mucho espacio para una mejora", apuntó.
Aunque la tasa de desempleo estadounidense se sitúa en un 5 por ciento, los críticos indican que el indicador no refleja la situación completa. Por ejemplo, si un ingeniero desempleado corta el césped de su vecino por un día y gana unos dólares por dicho trabajo, sería considerado como empleado esa semana según la definición estadounidense del empleo.
Muchos economistas apuntan a lo que consideran como la más exacta tasa de participación de la fuerza de trabajo. Como indica su nombre, el indicador mide el porcentaje de personas que participa de la fuerza laboral, que se sitúa en un 63 por ciento -un mínimo no registrado en décadas-.
El panorama laboral, sin embargo, es particularmente bueno para los graduados universitarios en Washington, donde los empleos son abundantes en muchos campos y los salarios son altos. Eso presenta en marcado contraste con muchas otras partes de EEUU que enfrentan dificultades económicas.
