NUEVA DELHI, 10 abr (Xinhua) -- Al menos 110 personas murieron y alrededor de 350 resultaron heridas a consecuencia de un gran incendio causado esta madrugada por fuegos artificiales festivos en un templo del sureño estado indio de Kerala, informó un alto oficial de la policía.
"El incendio tuvo lugar sobre las 3 de la madrugada durante un despliegue de fuegos artificiales en un terreno próximo al templo de Puttingal (distrito de Kollam), donde unas 15.000 personas participaban en el festival", reveló el oficial bajo condición de anonimato.
Unas 110 personas perdieron la vida y los heridos han sido trasladados a diversos hospitales en Kollam y otros distritos vecinos, donde se han establecido campamentos climatizados provisionales, dijo.
Agregó que el número de víctimas mortales podría ascender ya que algunos heridos se encuentran en condición crítica.
Helicópteros militares indios entraron en servicio para llevar a los heridos a los hospitales y el gobierno del estado ha cancelado los permisos de todos los doctores.
Según explicaron fuentes oficiales, el incendio se desató a causa de una chispa que prendió en un apilamento de fuegos artificiales.
En las imágenes ofrecidas por los canales de televisión locales, se puede ver una columna de humo blanco subiendo desde el templo, cuyo techo se derrumbó a causa de las explosiones sucesivas de los petardos, según las informaciones.
Según expresó el primer ministro indio, Narendra Modi, en su cuenta de Twitter, el incendio fue "desgarrador e impactante".
Anunció también que viajará a Kerala para visitar a los heridos en un vuelo especial de la Fuerza Aérea India, junto a un equipo de 15 doctores especialistas de la capital nacional.
"El incendio en el templo de Kollam fue desgarrador e impactante más allá de las palabras. Mis pensamientos están con las familias de los fallecidos y mis oraciones, con los heridos", apuntó Modi, quien anunció una compensación de 200.000 rupias (4.000 dólares) para las familias de cada difunto.
El ministro en jefe del estado, Oommen Chandy, indicó que el templo había desafiado las órdenes y había tirado "fuegos artificiales competitivos", una tradición dentro del actual festival de siete días para celebrar el comienzo del Año Nuevo para los keralitas.
"Se ha presentado una denuncia contra las autoridades del templo y pronto serán detenidas. Además, se ha ordenado una investigación judicial sobre el incendio", manifestó el oficial de la policía.
