MEXICO, 2 abr (Xinhua) -- El narcotráfico dejó de ser un problema de unos cuantos países en América Latina porque ahora en toda la región se producen, trafican y consumen narcóticos, advirtió el representante regional de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en México, Antonio Mazzitelli.
En entrevista con Xinhua, el funcionario del organismo multilateral expuso que prácticamente no existe ya una distinción entre los países productores o los que son territorios de tránsito dentro de la ruta de trasiego de drogas hacia los mercados más grandes, como ocurría antes.
Mazzitelli enfatizó que el consumo interno se ha incrementado en casi todos los países durante la última década, lo que debe llevar a los gobiernos a estrechar una cooperación regional para atacar las causas que provocan el uso de drogas desde un enfoque social.
"Está casi progresivamente eliminándose la distinción entre países de tránsito, países de origen, y países de destino. Todos los países al mismo tiempo se están volviendo de tránsito, destino y origen", sostuvo el representante regional de UNOCD para México, Centroamérica y el Caribe.
El Informe Mundial sobre las Drogas 2015 de UNOCD da cuenta de que Perú, Bolivia y Colombia siguen siendo los mayores productores de cocaína del mundo, pero países que antes eran paso de la droga hacia los mercados de Estados Unidos o Europa ahora cuentan con laboratorios clandestinos donde se procesa la hoja de coca.
Entre estas naciones están Argentina, Chile, Ecuador y Venezuela, en donde, sumados con los países productores, se han desmantelado miles de laboratorios en los últimos años.
"(Hay que) fortalecer los operativos y objetivos que los países tienen en común en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico, de un lado, y, del otro, buscar medidas más eficientes para hacer frente a los problemas generados por la demanda", expuso Mazzitelli.
El funcionario de la UNOCD añadió que los gobiernos también pueden analizar una cooperación en alternativas de políticas penales más eficientes para contrarrestar el tráfico a pequeña escala de los narcóticos en sus países.
La quinta parte de los 17 millones de consumidores de cocaína que existen a nivel global se encuentra en América Latina, luego de que su uso aumentó en países centroamericanos y caribeños, según las estimaciones del reporte anual de la UNOCD.
El informe anual apunta que el consumo de mariguana se incrementó en países de Sudamérica, Centroamérica y el Caribe. Ahora en la región se asegura o destruye el 30 por ciento de toda la cannabis que se incauta a nivel mundial, aunque principalmente en México.
Durante 2013 casi 1,6 millones de personas se inyectaron algún narcótico en la región, donde México y Colombia son los mayores proveedores de heroína del mercado de Estados Unidos.
Mazzitelli expuso que la eliminación de distinciones entre países de origen, paso y destino de los narcóticos es un punto que reconoce el documento que será discutido en la Sesión Especial de la Asamblea General de la ONU (UNGASS) sobre el problema mundial de las drogas.
La sesión especial, que se llevará a cabo del 19 al 21 de abril en Nueva York, podría sentar las bases para que el combate a las drogas a nivel global cambie del actual enfoque punitivo hacia uno de prevención del consumo y apoyo al consumidor.
El consumo de drogas ocasionó hasta 10.900 muertes en América Latina durante 2013, según estimaciones de Naciones Unidas, a lo que se suma el alto índice de violencia que experimentan varios países en Centroamérica y Sudamérica por la operación de grupos criminales que trafican las droga.
Para enfrentar el problema de las drogas, América Latina tiene la posibilidad de fortalecer instrumentos regionales y generar políticas comunes que permitan contrarrestar la oferta y demanda de enervantes, consideró el funcionario de la UNOCD.
"Me refiero, por ejemplo, a la enorme experiencia que tiene la región en materia de desarrollo alternativo o de fortalecimiento e implementación de políticas de reducción de la demanda a través de intervenciones más enfocada en lo social y la remoción de las causas estructurales que generan los problemas de droga", dijo Mazzitelli.