RIO DE JANEIRO, Brasil, 1 abr (Xinhua) -- La producción industrial en Brasil disminuyó 2,5 por ciento en febrero pasado frente a enero y 9,8 por ciento respecto al segundo mes de 2015, según los datos presentados hoy por el estatal IBGE.
El instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) reportó que la baja de febrero representó el peor resultado para un mes desde diciembre de 2013.
Durante los dos primeros meses del año, la planta industrial reflejó un descenso de 11,8 por ciento en comparación con igual período de 2015.
En los últimos 12 meses (hasta febrero), la contracción fue de 9 por ciento, la más elevada desde noviembre de 2009 cuando descendió 9,4 por ciento.
En enero pasado, la producción industrial brasileña aumentó 0,4 por ciento respecto a un mes anterior, el primer crecimiento observado para un mes desde mayo de 2015.
"El nivel en que opera la industria en este momento, es un nivel que se parece mucho al de diciembre de 2009 (año de la crisis financiera mundial)", indicó el IBGE.
En ese momento, la producción de la industria mostraba "claramente" el punto más bajo de su serie histórico (diciembre de 2008).
El reporte del IBGE expuso que el resultado de febrero mostró también una constante de tasas negativas respecto a las grandes categorías económicas.
Un total de 13 de los 24 sectores de la industria brasileña reportaron entre enero y febrero pasados resultados negativos.
La producción de vehículos, remolques y carrocerías disminuyó en el lapso de referencia 9,7 por ciento; máquinas y equipamientos lo hizo en 6,7 por ciento; y productos alimenticios 1,7 por ciento.
En contraparte, aumentó 1,4 por ciento la generación de coque (combustible a partir de carbón mineral).
Los productos derivados del petróleo y los biocombustibles crecieron 1,3 por ciento, al igual que perfumes, jabones y productos de limpieza, además de higiene personal.
La industria extractiva tuvo un aumento de 0,6 por ciento y los productos textiles 3,4 por ciento.
La industria brasileña es uno de los sectores más afectados por la crisis económica que vive el país sudamericano, cuyo Producto Interno Bruto (PIB) se contrajo 3,8 por ciento en 2015 y lo hará en 3,5 por ciento en 2016, según estimaciones del mercado financiero.
A lo anterior se suma una alta inflación, desempleo y la tasa de interés de referencia que se enentra en niveles muy altos (14,25 por ciento anual).
