EDIMBURGO, Reino Unido, 29 mar (Xinhua) -- Una nueva investigación de la Universidad de Edimburgo en Reino Unido descubrió el papel que juegan los genes en el abuso de algunas personas de la sal en las comidas, señaló hoy la universidad en un comunicado.
El estudio ayuda a los investigadores a entender la forma en la cual el cerebro controla el apetito por la sal, y cómo impacta en los niveles de la presión sanguínea, agrega.
Los científicos modificaron ratones para remover un gen en un pequeño número de células en sus cerebros. El gen es conocido por estar relacionado con la hipertensión en los humanos, sin que se tenga claro cómo la controla, dice el comunicado.
Al remover el gen, los ratones desarrollaron un fuerte apetito por la sal, y cuando se les ofreció como opción agua normal para beber o agua salada, ellos consumieron tres veces más agua salada que los ratones no modificados.
La prueba también mostró que los ratones modificados experimentaron alta presión arterial mientras bebían agua salada. Cuando se les retiró el agua salada su presión regresó a la normalidad.
Los hallazgos sugieren que el gen desempeña un importante papel en el control tanto de las ansias por consumir sal, como su efecto en la elevación de la presión sanguínea, mencionaron los científicos.
El grupo ahora investigará si un medicamento asequible, que actualmente se emplea para tratar enfermedades cardiacas en algunos países, puede ayudar a poner bajo control el consumo de sal en pacientes con problemas del corazón.
Matthew Bailey, quien encabezó el estudio en la Universidad de Edimburgo-Centro de Ciencias Cardiovasculares BHF (Fundación Cardiaca Británica), declaró que "en Reino Unido, acostumbramos consumir mucha más sal de la que nuestro cuerpo requiere. Para la mayoría de las personas eso es malo para el corazón, para los vasos sanguíneos y para los riñones. Nuestro estudio muestra que tenemos un estímulo genético para el consumo de alimentos salados. Entender cómo funciona este proceso puede ayudarnos a reducir la cantidad de sal que comemos y facilitar que la gente siga dietas bajas en sal". Fin