BEIJING, 25 mar (Xinhua) -- Las autoridades de hacienda y tributaria de China han anunciado que se expandirá el programa piloto del impuesto sobre el valor añadido (IVA) a todos los sectores, con el objetivo de profundizar la reforma fiscal y tributaria del país.
A partir del 1 de mayo, el reemplazo del impuesto sobre empresas por el IVA se extenderá a la construcción, la actividad inmobiliaria, los servicios financieros y los de consumo, a fin de garantizar que se reduzca la carga tributaria en todas las industrias, según un comunicado conjunto publicado ayer por el Ministerio de Hacienda y la Administración Estatal de Impuestos.
Un IVA del 11 por ciento se recaudará entre las empresas de construcción e inmobiliarias, mientras que se aplicará un tipo del 6 por ciento a los sectores de servicios financieros y de consumo, según el comunicado.
Las mercancías tangibles han estado sujetas al IVA por cierto tiempo, pero el impuesto por servicios es un impuesto sobre empresas, que se aplicaba al valor de las ventas de una empresa: Un sistema tan poco sofisticado resultaba en impuestos sobre tributos, ya que el impuesto se aplica sobre otros impuestos ya incluidos en los suministros que la empresa consigue.
El IVA evita la doble tributación ya que se aplica sobre el valor agregado en cada eslabón de la cadena de producción.
Según una estimación oficial divulgada tras una reunión del Consejo de Estado el viernes pasado, la reforma aliviará los impuestos en más de 500.000 millones de yuanes (76.900 millones de dólares) este año.
Un proyecto piloto de reemplazo del impuesto sobre empresas por el IVA comenzó en 2012 y se ha expandido gradualmente. Según estadísticas oficiales, este programa había recortado la carga tributaria de las empresas, en su mayoría de tamaño pequeño, en 641.200 millones de yuanes hasta el término de 2015.
