Por Noemí Galbán
LA HABANA, 18 mar (Xinhua) -- Autenticidad, ritmo, fusión, energía, entrega, corazón e identidad son las palabras que describen a la compañía Lizt Alfonso Dance Cuba, la única que en representación de la isla participará en la gala inaugural del Año de Intercambios Culturales China-América Latina y el Caribe.
El evento tendrá lugar el venidero 25 de marzo en el Teatro Tianqiao de Beijing, escenario donde la agrupación danzaria cubana deslumbrará una vez más al público chino.
"Para nosotros es un honor y un placer poder representar a nuestro país y presentarnos nuevamente en China. Además, Beijing es una de las pocas ciudades en las que nos falta bailar porque ya estuvimos de gira en China a finales de 2014 y principios de 2015. Eso nos llena de júbilo", declaró a Xinhua la directora general de la compañía, Lizt Alfonso.
Sin importar las distancias geográficas y las diferencias culturales, una propuesta artística de calidad siempre se impone y se convierte en pretexto para abrir el diapasón, en aras de profundizar los vínculos entre las naciones.
"China para nosotros era una gran incógnita, pero indiscutiblemente lo que se hace con el corazón triunfa donde quiera que va y el público chino siempre nos ha acogido con gran cariño, se alegran, se envuelven con lo que hacemos, se sienten identificados", agradeció Alfonso.
Oportunidad de lujo entonces para los admiradores del buen arte para apreciar un espectáculo de exquisita factura que recoge en gran medida la esencia de la cubanía.
Como lo describió la maestra a Xinhua, "el público chino podrá admirar nuestra identidad cultural porque eso es lo que hacemos, combinar el ballet, la danza contemporánea, los bailes populares cubanos y afrocubanos, el flamenco, todo ello mezclado en una gran amalgama que nos da la fusión que es lo que somos los cubanos".
En esta oportunidad, la compañía presentará un programa diverso, con el cual busca recibir una gran acogida en China y reeditar el éxito de la gira anterior.
Fragmentos del espectáculo "Cuba Vibra", muy aclamado el pasado año en Estados Unidos y Latinoamérica; así como las coreografías "Alas para volar" y "Fuerza y compás", formarán parte de la entrega del ballet Lizt Alfonso en esta ocasión.
Una muestra en sí misma de la evolución estética y conceptual de la compañía que ha alcanzado la excelencia propia de la madurez en estos 25 años de existencia.
"No hay clave para el éxito, es sencillamente trabajar duro y enfocarse en tener resultados. Aprender de las experiencias pasadas, pero seguir adelante con sinceridad, perseverancia, voluntad y objetivos bien definidos. Esa es la meta y como tiene forma de escalera, nunca acaba porque siempre tiene un peldaño más alto que alcanzar", confesó la directora.
Una fórmula que a Lizt Alfonso Dance Cuba le ha reportado muchas alegrías y tuvo su punto cimero el pasado año, al convertirse en la primera compañía de danza, con su sede en la isla, en actuar en la gala de entrega de los Grammy Latinos en representación de su país.
El hecho por sí mismo bastaría para regocijar a cualquier artista, pero lo que más valora la maestra Alfonso "es que al final del espectáculo no gritan Viva el Ballet Lizt Alfonso, sino gritan Viva Cuba y al final es toda la cultura de una nación en el espíritu y en el alma de otros pueblos".
Valores que comparte la joven maestra y directora general de la agrupación con sus alumnos, pues desde el año 1992 se fundaron los talleres vocacionales y posteriormente la escuela de Lizt Alfonso Dance Cuba.
Aunque en sus inicios la idea era insertarse en la comunidad, actualmente la academia recibe a niños de toda la capital y de otras provincias del país, quienes ingresan a partir de los 4 años de edad.
"Hoy por hoy la compañía está compuesta en un 95 por ciento por bailarines que se formaron en la escuela del ballet Lizt Alfonso. Ese es un sueño concretado porque ves el fruto de tu trabajo convertido en un profesional recibiendo triunfos propios, siendo el orgullo de sus maestros y de todo un país", resaltó.
Sin embargo, aclaró Alfonso, los pequeños que reciben clases en sus talleres no sólo se preparan como bailarines, sino como "seres humanos de bien, útiles a su sociedad".
Esa es, a su juicio, la mayor contribución de la compañía a Cuba; ese es también el espíritu, el compromiso, el ímpetu, el dinamismo y la fuerza que le imprime a sus coreografías y mueve cada fibra de quienes tienen la oportunidad de disfrutar un espectáculo de Lizt Alfonso Dance Cuba.
