BEIJING, 13 mar (Xinhua) -- China ha mantenido una "alta presión" contra la corrupción para sostener el impulso de una campaña anticorrupción que comenzó hace más de tres años.
Un total de 22 ex funcionarios de nivel ministerial o superior, incluido Zhou Yongkang, fueron procesados en 2015, mientras que 41 fueron sujetos a investigación formal, frente a 28 en 2014, según un informe de trabajo de la Fiscalía Popular Suprema (FPS), que presentó el fiscal general Cao Jianming en la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional (APN).
El presidente del Tribunal Popular Supremo, Zhou Qiang, también indicó que los tribunales han llevado a término procesos contra Zhou Yongkang y otros 15 altos funcionarios, lo que demuestra "la firme determinación del país y el Partido en la lucha contra la corrupción".
Tres años tras su arranque, la masiva campaña anticorrupción dirigida tanto a "tigres" como a "moscas", dos términos asignados a funcionarios en función de su mayor o menor rango y nivel de corrupción, ha dado pocas señales de perder impulso.
A principios de este mes, la Comisión Central para Control Disciplinario del Partido Comunista de China anunció una investigación contra Wang Min, vicepresidente del Comité de Educación, Ciencia, Cultura y Salud Pública de la APN, por presuntas violaciones del código de conducta del Partido.
Según el informe de trabajo de la FPS, cerca de 80 ex funcionarios chinos de nivel ministerial o superior se encontraban bajo investigación entre 2013 y 2015.
"Continuaremos manteniendo una alta presión contra la corrupción", prometió Zhou.
Un total de 54.249 funcionarios estaban bajo investigación en 2015 por su implicación en 40.834 casos de corrupción, según el fiscal general Cao, lo que representa una ligera caída respecto al año anterior, cuando se procesó a 55.101 funcionarios en 41.487 casos.
Entre los investigados estuvieron 4.568 funcionarios a nivel de división o superior, y 769 de nivel de prefectura o superior.
Por lo que respecta a los "tigres", los fiscales trataron 4.490 casos de prevaricato, soborno y malversación por valor de más de un millón de yuanes (154.083 dólares) cada uno.
Más de 13.000 funcionarios fueron investigados y castigados por aceptar sobornos, y 8.200 por ofrecerlos.
En cuanto a las "moscas", las fiscalías investigaron y castigaron más de 20.500 funcionarios de nivel de base de los sectores agrícola, de adquisición de tierras, seguridad social, educación y servicios médicos, dijo Cao.
Tanto Cao como Zhou se comprometieron a trabajar con más eficiencia para erradicar la corrupción en la judicatura. Un total de 2.424 personas del sistema judicial fue investigado y castigado por corrupción en 2015, según Cao, mientras Zhou prometió "tolerancia cero" ante la corrupción judicial.
"Construiremos un mecanismo eficaz para luchar contra la corrupción en el cual los funcionarios no se atrevan, ni puedan, ni quieran ser corruptos", aseveró Cao. "El poder será encerrado en la jaula de las regulaciones".
Sus declaraciones se hicieron eco de un comunicado publicado en enero tras la conclusión de la sexta sesión plenaria de la 18ª Comisión Central para Control Disciplinario, el cual llamó por una política de mano dura contra de corrupción "con fuerzas incesantes y a ritmo constante".
Los funcionarios anticorrupción trabajarán para reducir la corrupción y evitar que los casos de corrupción crezcan, según el texto. Se han de dedicar esfuerzos para asegurar que los funcionarios "no se atrevan a ser corruptos", y a fortalecer el sistema de modo que los funcionarios "sean incapaces y no deseen ser corruptos", indicó el papel.
Mientras tanto, dado el considerablemente reducido espacio doméstico para la corrupción y el abuso de poder, China también busca expandir la cooperación internacional en la persecución de los sospechosos que han huido al extranjero.
Según el fiscal general Cao, las autoridades chinas repatriaron a 124 sospechosos de corrupción de 34 países y regiones, quienes habían huido antes de una búsqueda global que duró 17 meses.
Diecisiete de los cien prófugos buscados con "notificación roja" de Interpol también fueron capturados, señaló Cao, quien agregó que China fortalecerá los esfuerzos en colaboración con los países y las regiones relevantes para repatriar ante la justicia a los que aún se encuentren en libertad, además de explorar métodos para confiscar sus ganancias ilegales.
El presidente de la corte suprema también exigió a los tribunales locales más esfuerzos para mejorar los procedimientos judiciales para los fugitivos sospechosos de corrupción y adoptar una posición más proactiva en las búsquedas transfronterizas de supuestos delincuentes.
Los legisladores chinos presentes en la sesión anual de la APN elogiaron los logros alcanzados en 2015 en la lucha contra la corrupción, al tiempo que demandaron que se dedicasen más esfuerzos para cortar de raíz esta pandemia.
Liu Ling, legislador y abogado de la provincia oriental de Jiangsu, urgió a las autoridades a acelerar la elaboración de una ley anticorrupción.
"Tenemos una necesidad acuciante de una legislación especial que regule las operaciones anticorrupción, proteja a los informantes, promueva la declaración de activos de un funcionario y coordine la labor de los departamentos disciplinarios del Partido y los órganos judiciales del país", declaró.
Peter Wong Man Kong, legislador de Hong Kong, mientras tanto, instó a "ataques precisos" en la operación anticorrupción, con la meta de impulsar la profundización de las reformas a nivel general.
"La actual campaña contra la corrupción se lanzó cuando el país planea profundizar las reformas y librar su batalla final contra la pobreza, por lo tanto, la campaña debe enfocarse en estos terrenos", opinó y subrayó como las máximas prioridades las elecciones de los gobiernos locales y los servicios agrícolas a niveles básicos.