SANTIAGO, 9 mar (Xinhua) -- El ministro chileno de Defensa, José Antonio Gómez, informó hoy que el funeral del general Sergio Arellano, quien encabezó la "Caravana de la Muerte" durante el gobierno militar (1973-1990), tendrá estricto carácter privado.
"Está prohibido en Chile rendir homenaje a los militares que participaron en la represión durante el régimen militar", según el decreto dictado en el primer gobierno de la presidenta Bachelete (2000-2006), por tanto "quienes quieran asistir a su funeral de Arellano (muerto este miércoles) podrán ir en forma privada", explicó el ministro de Defensa.
El fallecido general encabezó la "Caravana de la Muerte", comitiva militar que partió de Santiago el 30 de septiembre de 1973, luego del golpe de Estado contra el entonces presidente de Chile, Salvador Allende, para recorrer el sur y norte del país en un viaje de exterminio que cobró 96 víctimas.
Esa misión fue ordenada por Augusto Pinochet a Arellano, uno de los más importantes militares conspiradores del Golpe de Estado.
En la ciudad de Linares se reportaron cuatro víctimas; en Valdivia, 12; en Cauquenes, cuatro; en Curicó dos; en La Serena 15; en Copiapó 16; en Antofagasta, 14; en Calama, 26; y en Arica tres.
"Cada vez que se produce la muerte de alguien que está involucrado en materia de derechos humanos y hay una condena, no está permitido rendirle honores y, por lo tanto, nadie institucionalmente lo puede hacer y eso involucra también a quienes son parte de la institución", explicó Gómez.
"En estos casos lo que se hace y, lo que se ha hecho hasta ahora, es que los funerales son privados y se hace de una manera en que no produzcan ninguna dificultad desde el punto de vista institucional, abundó.
Según la Comisión de Reparación y Justicia de Chile, durante el régimen militar se cometieron 3.197 asesinatos, más de 30.000 casos de tortura y aún hay más de 1.200 desaparecidos.