MONTEVIDEO, 1 mar (Xinhua) -- El presidente de Uruguay resaltó el martes como un logro del primer año de gestión de su segundo mandato la reducción de la pobreza hasta un 9 por ciento y pidió trabajar para mantener el grado inversor de la deuda pública.
Vázquez, quien volvió al poder el 1 de marzo de 2015 para encabezar el tercer gobierno consecutivo del izquierdista Frente Amplio (FA), reconoció que el año pasado fue "difícil" y planteó "grandes desafíos, tanto internos como externos".
En ese sentido, mencionó los conflictos con los trabajadores de diversas áreas en el marco del debate por la aprobación del presupuesto estatal, pero finalmente se superaron apelando al diálogo.
"El Uruguay ha mantenido, pese a esas dificultades, su rumbo", remarcó el mandatario, de 76 años, en un discurso emitido esta noche por cadena nacional de radio y televisión.
Resaltó que "continuamos mejorando la inclusión en nuestro país" y "la indigencia se redujo de un 5 por ciento en 2004 a un 0,4 por ciento en 2015".
Además, la pobreza cayó del 40 por ciento en 2004 al 9 por ciento en 2015, mientras la mortalidad infantil bajó a un mínimo histórico de 7,78 por mil niños nacidos vivos.
"Crecimiento, ¡sí! ¡Pero crecimiento de todos juntos! Crecimiento, con justicia social", enfatizó quien gobernó por primera vez entre 2005 y 2010.
Aseguró, también, que el Sistema Nacional de Cuidados, aprobado por ley, comenzará a implementarse para atender a la primera infancia de 0 a 3 años, a personas con discapacidad y a los adultos mayores.
Por otra parte, el gobernante destacó que "hemos logrado que el desempleo continúe manteniendo cifras históricamente bajas para nuestro país (7,5 por ciento)".
En otro pasaje de su discurso, llamó a "trabajar fuertemente para no perder el grado inversor; siendo este el activo financiero intangible más importante que tiene Uruguay".
"De perderse el mismo, los impactos indirectos sobre el sector real de la economía serían muy negativos. La confianza en el país se vería afectada y, con ello, la inversión extranjera directa la cual ha sido uno de los pilares del crecimiento de los últimos años", advirtió.
Asimismo, "implicaría un aumento significativo en la carga de intereses de la deuda pública (que el año pasado representaron 3,5 por ciento del PIB) y aumentaría el costo del endeudamiento para todos los proyectos de inversión, tanto públicos como privados".
Vázquez se comprometió a "luchar frontalmente y sin tregua contra la inflación (situada en 9,44 por ciento anual), ya que esta es una carga pesada para los sectores de la población con ingresos fijos y con menores ingresos".
A nivel del gasto público, reafirmó el compromiso de evitar la persistencia de una "lógica incremental" y de "disminuir los gastos del Estado que no sean prioritarios", aunque "mantendremos en todo su nivel la inversión comprometida en políticas sociales".
"Nos comprometemos a mantener firme el rumbo que nos permitió avanzar hacia un país con crecimiento económico y justicia social", concluyó.