CHONGQING, China, 15 feb (Xinhua) -- Tao Xingyue, de 12 años de edad, y Tao Junshen, de 10, solían sufrir al final de las vacaciones de Año Nuevo chino cuando su padres los dejaban en casa para regresar a sus empleos distantes. Este año no tienen motivos para llorar.
Luego de cinco años de vivir con su tío en su aldea a las afueras de la municipalidad de Chongqing, los niños tienen a su mamá y papá de regreso a su lado.
Xingyue y Junshen eran parte de los 60 millones de niños rurales chinos "dejados por padres" que se ganan la vida en ciudades lejanas. La mamá Yu Changmei, una limpiadora, y el padre Tao Yonghong, un guardia de seguridad, sólo podían regresar a casa dos veces al año desde la provincia de Guizhou.
Sin embargo, ahora son un ejemplo de un tipo cada vez más común de familia china, la que se vuelve a reunir. Con una mayor conciencia de los riesgos para los niños dejados por sus padres, la población migrante de China disminuyó por primera vez en cerca de 30 años en 2015. El gobierno desea que los migrantes regresen a casa por razones económicas, pues está haciendo esfuerzos para reducir las disparidades del desarrollo urbano-rural, pero también para ayudar a los niños solitarios.
El domingo, el Consejo de Estado publicó una directriz para proteger a los niños dejados por su padres migrantes, la cual define las responsabilidades de padres, gobierno y sociedad en general.
Éste es uno de los dos elementos de su enfoque: las autoridades realmente no desean que ningún niño sea dejado por sus padres migrantes.
La mayoría de los residentes de las afueras de Chongqing son campesinos que ganan muy poco dinero. El gobierno municipal está ayudándolos a iniciar sus propios negocios desde su casa o a encontrar trabajo en lugares cercanos.
Chongqing ha ofrecido 7.400 millones de yuanes (1.100 millones de dólares) en préstamos de bajos intereses a 89.000 trabajadores migrantes en los últimos cuatro años. Los negocios que empleen a más de 100 ex campesinos pueden obtener subsidios de hasta 600.000 yuanes, y 36 parques industriales están ofreciendo talleres, orientación empresarial y financiando en especial a los trabajadores migrantes que regresan.
Más de 1,7 millones de trabajadores migrantes han regresado a Chongqing desde 2010, y casi una tercera parte de ellos han comenzado sus propios negocios, de acuerdo con el departamento municipal de recursos humanos y seguridad social.
SEPARACIÓN TIENE UN PRECIO DEMASIADO ELEVADO
Yu Changmei y Tao Yonghong han perdido todos los beneficios de estos esquemas. Yu requirió tres meses para conseguir un empleo en una fábrica de dispositivos electrónicos con un salario mensual de 1.600 yuanes, casi lo mismo que ganaba en Guizhou. Tao aún no ha encontrado empleo.
Incluso así, ellos creen que ser una familia de nuevo vale más que la disminución en sus ingresos. "Vale la pena", dijo Yu. "La separación de mi familia y mi comunidad era un precio demasiado elevado que pagar".
No fue el gobierno quien los persuadió de regresar, sino el maestro de sus hijos. Peng Kaiqiang se dio cuenta que a menudo los dos estaban tristes y no disfrutaban de las fiestas de la escuela como los otros niños.
"Su tío los trataba bien y su familia adoptiva no sufría por dinero. Lo que no tenían era el amor de sus padres", dijo Peng.
Peng visitaba a Yu y a Tao cada semana y hablaba con ellos del desempeño de sus hijos en la escuela. Eventualmente, Yu se dio cuenta de que la separación no estaba haciendo bien a sus hijos.
Poco después que la pareja regresó a casa, Peng vio que Xingyue y Junshen salieron de sus caparazones.
"Ellos solían seguir a su tío de regreso a casa en silencio, pero ahora hay abrazos y risas cuando su mamá o papá los recoge", dijo el maestro.
VOLVIENDO LA SEPARACIÓN MENOS COSTOSA
Otros en su clase están sintiendo el amor. El número de niños en su escuela que fueron dejados por sus padres migrantes ha disminuido de más de 30 en 2012 a 11 en la actualidad.
En los últimos tres años, la población de niños dejados por sus padres en Chongqing se ha reducido en 16,8 por ciento a 890.000.
Tan alentador como esto pueda ser para el bienestar de los niños, la gran cantidad de trabajadores migrantes en todo el país (247 millones a fines de 2015, de acuerdo con el Buró Nacional de Estadísticas) significa que el problema no ha desaparecido.
Las autoridades están listas para actuar bajo la directriz emitida el domingo por el Consejo de Estado.
"El fenómeno persistirá, tomando en consideración el desarrollo económico y social de China", dijo Li Yi, director de asuntos infantiles de la federación de mujeres de Chongqing.
"Ayudaremos a los padres de los niños dejados a prepararse en sus aptitudes de crianza y a elevar su conciencia sobre la seguridad", dijo Li. "Tenemos 200.000 voluntarios listos para ofrecer atención y apoyo".