BEIJING, 15 feb (Xinhua) -- Es lamentable que algunos políticos estadounidenses prioricen el asunto del mar Meridional de China durante la reunión de líderes de Estados Unidos y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, siglas en inglés), prevista para este lunes.
Según Ben Rhodes, viceasesor sobre Seguridad Nacional de Obama, el presidente de EEUU enviará un "contundente mensaje" a China, apuntando a que el país asiático es un alborotador que intimida a países vecinos más pequeños en lo referente al asunto del mar Meridional de China.
El encuentro en Sunnylands, California, que se considera una oportunidad para que las dos partes discutan la promoción de las relaciones, podría acabar siendo un intento por parte de Washington de utilizar a la ASEAN para contrarrestar la creciente influencia de China.
Irónicamente, mientras pide esfuerzos para evitar acciones militares innecesarias en el mar Meridional de China, Washington envió el mes pasado un destructor con misiles guiados a 12 millas náuticas de la costa de una isla china situada en el citado mar, en un obvio intento por frenar a China haciendo un alarde de poder.
Washington también ha alentado a naciones que tienen disputas con China a que se involucren en provocaciones militares e internacionalicen las disputas.
Lo más exasperante son los últimos comentarios de Harry Harris, comandante de la Flota del Pacífico de EEUU. Aunque su país no forma parte de las disputas en el mar Meridional de China, Harris dijo en un discurso público que su país continuará retando a China en el asunto, añadiendo que "esas islas no pertenecen a China".
En contraste contra la trama interesada de Washington, China ha estado promoviendo la estabilidad y el desarrollo regionales. La iniciativa de "la Franja y la Ruta" de China y el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura son buenos ejemplos.
China, beneficiaria de la libre navegación en el mar Meridonal de China, siempre está dispuesta a promover el código de conducta y participar en la construcción de infraestructuras civiles en las aguas para asegurar la libre navegación.
Es la posición inquebrantable de China que las disputas sobre el mar Meridional de China deben solucionarse a través de negociaciones y consultas directas entre China y los países concernientes.
Sobre el asunto del mar Meridional de China, Washington debe recordar que China nunca hará la vista gorda a un desafío a su indiscutible soberanía. Subestimar la resolución de China de defender sus intereses fundamentales sería un auténtico error.
EEUU no es y nunca será portavoz de una organización independiente como la ASEAN en ningún tema. Es hora de que los países sensatos de la ASEAN se distancien de la intervención estadounidense.